Está listo para su aprobación inicial en el Consell, pero falta concretar de dónde saldrá el dinero para su ejecución. El conseller de Gestión del Territorio, Infraestructuras Viarias, Ordenación Turística y Lucha contra el intrusismo, Mariano Juan, presentó ayer la última versión del proyecto de reforma de la E-10 en el tramo de la avenida de la Paz desde la rotonda de Can Misses a la rotonda de ses Figueretes.
La principal novedad del proyecto, cuya primera versión es de 2011, es la incorporación de una entrada subterránea a la estación intermodal Cetis para los autobuses y cambios en el sistema de drenaje de las aguas de lluvia que bajan de la zona de Can Escandell.
Varias personas cruzan la carretera por un tramo en el que está previsto el pintado de pasos de cebra en el futuro proyecto. Fotos: MARCELO SASTRE
En el encuentro entre el Consell y el Ayuntamiento de Vila, además de los técnicos de ambas instituciones, estuvieron la primera teniente de alcalde de Vila, Elena López y el segundo teniente de alcalde, Aitor Morrás.
«Se trata de un proyecto muy importante para la capital de la isla que aspira a coser las dos partes de la ciudad a ambos lados del primer cinturón de ronda. Lo que queremos es que Vila trabaje ahora con el proyecto y lo haga suyo», indicó el conseller.
Por su parte la primera teniente de alcalde de Vila explicó que el Consistorio iniciará ahora la tarea de analizar el documento de más de 1.500 páginas, sobre todo para verificar que se han recogido todas las modificaciones al proyecto que se han pedido en los últimos años y que el proyecto sigue la línea de la idea de ciudad que tiene el gobierno local.
Los trabajos, con un coste de nueve millones de euros, supondrán la construcción de un bulevar con un paseo amplio en el centro y dos carriles en cada dirección. El plazo de ejecución es de 15 meses desde la formalización del contrato, según precisaron desde el Consell d'Eivissa.
La modificación del vial incluye diversas conexiones entre las calles de un lado y otro de la E-10, que, como explicó Mariano Juan, pasará a ser una calle más. Una vez se ejecute será posible cruzar desde la avenida Isidoro Macabich a la calle d'Albarca, y el acceso a la avenida de la Paz desde la calle Vicent Serra i Orvay.
Imagen del proyecto.
Mariano Juan indicó que no se ha tratado la reforma del resto de tramos de la E-10, que figura en alguno de los proyectos iniciales para esta vía, pero sí se trabaja en la previsión de encadenar el tramo de carril bici que contempla el proyecto con la continuación que va hacia el centro de Vila y el carril que se dirige a Platja d'en Bossa.
Próximos pasos
El Consell tiene ahora que tramitar la aprobación inicial del proyecto para su exposición pública, en esta fase tanto el Ayuntamiento de Vila como la ciudadanía podrán presentar alegaciones y tras su resolución e incorporación de posibles modificaciones se hará la aprobación definitiva.
En ese tiempo el conseller señaló que será necesario buscar la financiación. «No hablamos de una obra fácil de financiar. Existen varias opciones: a través del presupuesto ordinario, del convenio de carreteras con el Estado, los fondos de capitalidad o incluso los fondos europeos. Son varias vías para poder hacer la licitación lo más rápido posible».
El Consell confía en poder incorporar este proyecto dentro del convenio de carreteras que negocia con el Ministerio de Fomento, al que todavía debe enviar el listado de obras a financiar y entre las que se incluiría esta entre las principales. «Dependiendo de si se acepta o no, aparecerá en el presupuesto de una forma u otra», explicó el conseller.
En cualquier caso, Juan aseguró que esto no debería suponer un retraso en el proyecto. «Los fondos se tienen que encontrar. El compromiso del equipo de gobierno es obtener estos fondos de alguna forma, no se aprueban proyectos para no ejecutarlos o que se queden en un cajón. No puede pasar lo que ya ocurrió en pasadas legislaturas», apuntó.