«Nils, cuando juguemos al golf siempre estarás a nuestro lado». «Querido Nils, siempre estarás en nuestros corazones. Nunca te olvidaremos. Te queremos». Los mensajes de Candela o María son algunas de las muestras de cariño recogidas en las decenas de corazones colgados en el olivo que desde ayer recuerda la figura del pequeño Nils Dupin en el tie del hoyo 1 del Golf Ibiza Club.
Ayer por la tarde, centenares de personas arroparon a la familia del pequeño de 12 años fallecido hace siete días y se sumaron al sentido homenaje celebrado en el club donde despuntaba como una de las estrellas del futuro y se hizo querer por su «arrolladora personalidad».
El acto arrancó con un breve oficio religioso en el que se remarcó que Nils «era un ser espiritual, feliz, que compartía la vida con todo el mundo y debemos quedarnos con ese recuerdo».
«Hace dos años, antes de la pandemia, ya se hablaba de las proezas de un fenómeno al que añadía un puñado de valores que lo hacían brillar y ser singular», resaltó José Vicente Máñez. «Era un fenómeno en todo lo que hacía», apostilló emocionado. El acto continuó con la plantación de un olivo en la zona de salida de «su campo». «Nils ha subido directamente a jugar al golf con los ángeles y solo se tendrá que preocupar de los celos de los ángeles». Los compañeros de la escuela de golf fueron los encargados de plantar el árbol y colgar los primeros corazones de recuerdo. Junto al olivo una placa en memoria del pequeño y decenas de coronas de flores. El acto finalizó con la suelta de unas palomas.
Nils Dupin, de 12 años, falleció el pasado domingo mientras buceaba a pulmón en Portinatx.