La amenaza de la presencia de un incendiario vuelve a planear sobre Sant Antoni tras una noche infernal con 14 coches quemados, cuatro de ellos siniestro total, y media docena de contenedores devorados por las llamas. Es parte del balance de una madrugada frenética en Sant Antoni para Bomberos, Policía Local y Guardia Civil. En poco más de cuatro horas los bomberos tuvieron que sofocar hasta cuatro incendios en otros tantos puntos del municipio. La última cadena de incendios, que afectó a coches y contenedores, alimenta la teoría de la intencionalidad.
Durante la jornada de este viernes, agentes de la Guardia Civil y de la Policía Local colaboraron en la búsqueda de pruebas y elementos que permitan esclarecer estos hechos. Así, se revisan las imágenes captadas por diversas cámaras de videovigilancia para aclarar el origen de los fuegos.
Carpa en llamas
El carrusel de incendios arrancó minutos antes de las 22.00 horas en el centro neurálgico del pueblo. Vecinos y transeúntes se sobresaltaron con las llamas que en cuestión de minutos se extendieron por la carpa ubicada en el Passeig de ses Fonts. Hasta el escenario del incendio se movilizaron varias unidades de la Policía Local y una dotación de bomberos. El material de la instalación generó una densa columna de humo y el resplandor era más intenso con la noche ya caída. Los bomberos sofocaron las llamas en cuestión de media hora pero el fuego ya había causado daños de consideración. Las primeras pesquisas apuntan a un fallo eléctrico como origen de este incendio.
Desde el Ayuntamiento informaron que la Fira del Disc se celebrará en la zona del Passeig de ses Fonts donde se alzan las casetas de la feria de Navidad.
Incendios en cadena
La tranquilidad apenas duró dos horas ya que a las 00.45 horas, los bomberos eran requeridos para sofocar un incendio de rastrojos en las instalaciones del antiguo retén policial. En este punto, las llamas acabaron calcinando tres vehículos que se encontraban en el depósito. El servicio se prolongó hasta las 02.17 y media hora después, nueva alarma, esta vez en la calle Vara de Rey. El resultado: dos contenedores arrasados por el fuego.Minutos después, tres coches eran pasto de las llamas en la misma calle.
Y la secuencia todavía sumó un episodio más devastador en las proximidades del cementerio. La alarma saltaba a las 04.55 horas. Aquí el fuego redujo a la mínima expresión cuatro contenedores y alcanzaba a un total de ocho vehículos, uno de ellos completamente calcinado.
«Es un auténtico desastre. Aparcas el coche por la noche y horas después te encuentras con esto. Si es intencionado, espero que lo detengan pronto», apuntaba uno de los vecinos afectados.
Este viernes fue jornada para valorar daños, reponer contenedores, limpiar los escenarios y avanzar en la investigación.