Numerosos usuarios del hospital Can Misses de Ibiza siguen denunciando la situación de caos, desorden y saturación, en el aparcamiento del hospital Can Misses de Ibiza.
Según informaron este jueves los propios afectados a Periódico de Ibiza y Formentera, el acceso a varias zonas de este parking quedó cerrado este miércoles para llevar a cabo trabajos de limpieza y puesta a punto, dejando inutilizables cerca del 30% de las plazas.
Los usuarios criticaron cómo durante la jornada pudieron verse caravanas de vehículos dando vueltas, entrando y saliendo del aparcamiento sin poder estacionar. Una ciudadana explicó además cómo intentó hablar con el responsable de la taquilla que «no quiso ni atender mi queja».
Otra usuaria del hospital que debe utilizar muletas lamentó que «es frustrante, tanto el trato como la organización del aparcamiento». Esta mujer exigió a los responsables que busquen fórmulas para «arreglar ese desaguisado».
Ante toda esta situación, la que fuera impulsora del Movimiento Pitiuso pro Radioterapia en Ibiza, la activista Carmen Tur, recordó este jueves que siguen recogiendo firmas para, entre otras cuestiones, solucionar el problema existente en el aparcamiento de Can Misses. Este próximo lunes, Tur tiene previsto entregar a instituciones como el Consell una tercera remesa de firmas para conseguir estas mejoras, centradas también en el servicio de Oncología de Can Misses.
«Falta de planificación»
Entre otras cuestiones, Tur recordó este jueves cómo el aparcamiento del hospital llegó a ser de los más caros de España. Ahora, la saturación que padece es tal que aparcar allí se ha convertido en misión imposible, según añadió.
Tur aclaró además que el aparcamiento tiene carácter gratuito, aunque «de gratuito nada porque tendremos que pagar durante 20 años por ello unos 312.000 euros».
Sobre el cierre de accesos para llevar a cabo trabajos de pintura y mantenimiento, Tur consideró que lo sucedido «es una evidente falta de planificación». Ante ello, la activista destacó su voluntad de seguir recogiendo firmas para que los responsables de la instalación, al menos, «conozcan el descontento existente entre el pueblo».
«Tenemos parlamentarios de Ibiza y, si no demuestran lo contrario, es de suponer que trabajan para la isla, por lo que deben solucionarnos este problema. Esta usuaria con muletas que debía someterse a unas pruebas para una operación no pudo dejar el vehículo en el aparcamiento. Con una cita no pudo aparcar y seguro que había estacionados vehículos de personas sin cita o sin ningún enfermo en el hospital. No hay ningún control», concluyó.