Los arqueólogos que trabajan en las obras de remodelación de la avenida de Isidor Macabich investigan los restos hallados ayer miércoles en la zanja abierta a la altura de la calle Bisbe Abad i Lasierra. Unos restos que, de momento, no han presentado características que hagan necesaria su conservación por lo que, según ha podido saber Periódico de Ibiza y Formentera, se ha optado por su destrucción.
En su cuenta de twitter, el concejal de Cultura de Vila, Pep Tur, ha añadido que no son restos arqueológicos sino una antigua acequia de la finca de ses Canyes. "Es un elemento moderno que ha sido documentado. El seguimiento arqueológico es constante", ha explicado.
La reforma de esta emblemática vía comenzó el pasado mes de abril y hasta ahora no se han producido hallazgos arqueológicos, según han señalado fuentes del Ayuntamiento de Ibiza. Las mismas fuentes han destacado el trabajo del equipo de arqueólogos, formado por dos técnicos, que «están trabajando a pie de obra de manera permanente». «Se siguen los controles arqueológicos requeridos en todo el proceso», añadieron.
El Consistorio ha explicado que los restos encontrados ayer son de «una acequia de riego». Se trataría, han añadido, de «un elemento moderno de la última fase de utilización del suelo rústico de la zona». Los arqueólogos los han «documentado» y, tras su destrucción, «las obras continúan con normalidad».
Otras fuentes consultadas por este periódico han indicado que los restos podrían pertenecer a «una antigua casa payesa que había en la zona», pero no han podido precisar si se trataría de una construcción «con algún interés arqueológico». Desde el Consell d'Eivissa han confirmado que se trata de «la última fase de una casa payesa que había antes». Por ello, se ha procedido a documentar el hallazgo y a mantener los trabajos de remodelación. «No tiene interés patrimonial», han indicado, «era un elemento inconservable».