Ibiza ha vuelto a vibrar este domingo con su esperado Carnaval, que concentró a miles de personas en una jornada de convivencia en la que la música y el colorido de los disfraces se dieron cita en un gran desfile por las calles de Vila. Un recorrido que ayer tuvo que variar debido a las obras de la avenida de Isidor Macabich. La rúa comenzó con la comparsa del C19, del centro de Juventud de Vila. Un numeroso grupo que ayer se disfrazó de Celtas «buscando el secreto de la eterna juventud». Tras esta carroza, aparecieron las comparsas educativas. El colegio S'Olivera, el centro L'Urgell y Can Cantó fueron la viva esencia del Carnaval más auténtico.
No obstante, solo uno de ellos pudo recibir ayer el primer premio en la categoría de ámbito escolar, un primer puesto que fue para las brillantes libélulas de S'Olivera, que reivindicaron el cuidado del agua con sus disfraces: las libélulas son pequeños insectos que necesitan el agua dulce para sobrevivir. El segundo premio fue para el carrusel de caballitos del CEIP Can Cantó y el tercero para los jóvenes ecologistas de L'Urgell con Salva la naturalesa.
Ingenio y talento
Sin duda, una gran muestra del ingenio y el talento de todos los participantes de estos centros educativos de Ibiza. La rúa continuaba velozmente, ya que en tan solo una hora las comparsas llegaron a la calle Ignasi Wallis desde la Avinguda de Sant Josep. Un desfile corto, pero intenso, que tuvo varios grupos reivindicativos de índole política y social. Fue el caso de S Insalut, comparsa ganadora en la categoría de ámbito social. Los participantes iban disfrazados de médicos con diversas pancartas en contra de la situación actual de la sanidad en la isla debido a la falta de médicos. Una comparsa formada por la Asociación de Cartagineses y Romanos de Ibiza. Muy cerca estaba Eivissa es rebel·la, agrupación que puso en el centro del debate los aviones de los más ricos, los jets privados, que «contribuyen al calentamiento global». Estos participantes iban disfrazados de payeses en bicicleta, manifestando que es el momento de devolver al campo y al mundo de las tradiciones ibicencas todo lo que le corresponde.
Escuelas de baile
Pronto llegó el turno también de las escuelas de baile de Ibiza que, a través del arte flamenco y la delicadeza de las geishas, ofrecieron un gran ambiente intercultural que animó todo el recorrido.
Estos disfraces estuvieron a cargo de la Escuela de baile J.V. Dance y el Estudio de danza Adrián Pineda. No obstante, el primer premio en la categoría de academia de baile fue para la comparsa Prestige de la Academia Real Dance de Santa Eulària.
También, entre los participantes, en total 16 comparsas, repitió la divertida tómbola humana que el sábado logró el primer premio en la categoría general del Carnaval celebrado en Cala de Bou. Un puesto que ayer, en el Carnaval de Vila, fue para Dragon Jump de la Escuela de danza Puig d'en Valls, que también se llevó el premio al grupo más numeroso con más de 150 personas.
El segundo premio fue para Los Chapacos de Bolivia, que iban ataviados con el traje regional de su país, y el tercero para el grupo Raíz Negra. Un colectivo formado por varias escuelas de danza africana que ayer utilizaron bombos y timbales durante el desfile. En ningún momento los participantes se sintieron solos, ya que cientos de personas, muchas de ellas disfrazadas, acompañaron a las carrozas y comparsas en su recorrido.
Un itinerario que terminó ayer en el bulevar Antoni Albert i Nieto, en cuya carpa se programó una paella popular cuya recaudación se destinará a Ibiza In, asociación para la inclusión de personas con diversidad funcional.
El carnaval más espantoso jamás visto