El presidente del Consell de Ibiza, el ‘popular' Vicent Marí, defendió en el pleno de este viernes de la institución una moción destinada a exigir de forma contundente a la líder del Govern, la socialista Francina Armengol, soluciones a la crisis de la sanidad pública en Ibiza. Marí logró con su intervención convencer a los representantes del PSOE y de Podemos de la necesidad de ir todos a una contra el «abandono» que sufren los ibicencos por parte del Ejecutivo de Armengol. Unos y otros habían anunciado que no votarían a favor de su propuesta pero acabaron haciéndolo. «El Govern tiene que dejar de tratarnos como ciudadanos de tercera», afirmó el presidente. Y advirtió: «El momento de instar ya se ha acabado. Ha llegado el momento de elevar el tono y de exigir de forma contundente».
Vicent Marí señaló que los dos problemas que más preocupan hoy a los ibicencos son la sanidad y la vivienda. Y, ante ellos, reclamó el trabajo conjunto de las administraciones y los partidos para buscar soluciones. «A mí me tendrán al lado», aseguró, «el Consell sabe negociar y trabajar con otras administraciones. Pero es verdad que el PSOE gestiona desde hace ocho años la sanidad y que es responsable de la situación que sufrimos ahora».
«Les pido humanidad y respeto y que luchen por los ibicencos», dijo dirigiéndose a los representantes del PSOE y Podemos en el Consell. Recordó cómo en la primera concentración de pacientes de oncología a las puertas de Can Misses, uno de ellos le dijo que «no se quiere morir». «Ya solo por esa persona vale la pena que apoyen la moción», señaló, «por humanidad, por dignidad, en defensa de los enfermos y de nosotros mismos, que seremos viejos y necesitaremos que se nos atienda y que se nos cuide».
Marí fue muy duro en su crítica contra el Govern por haber fijado como obligación que los sanitarios en Ibiza deban demostrar un certificado oficial de conocimiento del catalán. En este sentido, el presidente recordó que «a ningún político, ni aquí ni en el Parlament, se le exige el catalán». Y añadió: «Lo importante es curar. Esto no es política lingüística. Hablamos de la situación sanitaria. Pongámoslo fácil».
La consellera no adscrita Marta Díaz Pascual fue también muy incisiva en su intervención. Recordó cómo su padre falleció en Barcelona por cáncer y fue «atendido hasta el último momento». Algo que no sucede hoy en día en Ibiza. «La gente se está muriendo», advirtió y añadió: «La lengua no está por encima de la salud de la gente. La consellera de Salud se burla de los ibicencos cuando dice que la sanidad aquí es atractiva para los médicos». Díaz también vinculó la crisis sanitaria al problema de la vivienda, pero recriminó a los socialistas que su candidato al Consell y responsable de este área en el Govern, Josep Marí Ribas Agustinet, haya malbaratado el proyecto de construcción de 120 viviendas protegidas en el solar de la antigua comisaría.
La consellera no adscrita también se preguntó cómo es posible que la sanidad pública en Ibiza derive pacientes al sistema privado y al Hospital de Son Espases y que estos no sufran las mismas listas de espera que tiene Can Misses. Y, por si esto no fuera suficiente, recordó cómo una socialista, Sofía Hernanz, votó en el Congreso contra el plus de insularidad para los funcionarios en Ibiza, propuesto por el popular Miquel Jerez.
Pero si algo hizo estallar a Diaz este viernes en el pleno fueron las palabras del portavoz del PSOE, Vicent Torres, que defendió la gestión de Armengol y de la consellera Patricia Gómez en Ibiza asegurando que Can Misses cuenta con «un certificado de nivel alto», como forma de demostrar que la calidad asistencial en la isla es buena. Una afirmación que la consellera no adscrita contrarrestó preguntándose «qué importancia tiene un premio de excelencia si la gente aquí se muere porque no hay médicos».
Lo cierto es que el socialista no se mostró excesivamente preocupado por la situación sanitaria de Ibiza. Torres comenzó su intervención destacando que el presidente había hecho la suya en catalán, mientras que el portavoz de Ciudadanos, el conseller Javier Torres, lo había hecho en castellano. Aseguró que la situación sanitaria de la isla «es de primer nivel» y señaló que «no vale todo para rascar cuatro votos».
El portavoz del PSOE intentó desviar la atención hacia los problemas de falta de personal de algunos servicios insulares. Sin embargo, Torres acabó rindiéndose a la realidad descrita por Vicent Marí y aceptó votar a favor de la moción del PP y Ciudadanos.
El conseller de Podemos, David Álvarez, mostró, por su parte, preocupación por los pacientes que no saben expresarse en castellano, aseguró que la moción es «electoralista», criticó los alquileres turísticos ilegales y también intentó escudarse en la situación del personal de las entidades insulares para mostrar su rechazo a la moción. Sin embargo, también acabó votando a favor de la misma.
Así, el Consell acordó por unanimidad solidarizarse con los pacientes, los familiares y el personal sanitario del sistema público en Ibiza y exigir a la socialista Armengol y a su gobierno que tome las medidas necesarias para que los ibicencos reciban «una atención sanitaria de primer orden» y que cumpla con «los estándares de calidad que merece toda sociedad bienestante».