La formación ecologista GEN-GOB ha vuelto a exigir este lunes que se informe desfavorablemente el proyecto de urbanización de Ca n'Escandell, en Ibiza. Desde el Govern se limitaron a señalar que el expediente ha entrado ya en la Comisión balear de Medio Ambiente para seguir el procedimiento que siguen todos los proyectos registrados. Desde Conselleria no se pronunciaron en cuanto a los plazos previstos para su posible aprobación.
Desde el GEN-GOB reclamaron que se rechace la posibilidad de barajar en el proyecto el uso de aguas no potables y acuíferos sobreexplotados como recursos hídricos válidos.
El presidente de los ecologistas, Joan Carles Palerm, manifestó que el plan urbanístico «no está todavía justificado o no entendemos muy bien cómo se puede justificar que se va a contar con el agua suficiente para aquello que se contempla».
Según señaló, «lo que queremos es que den marcha atrás y aclaren esta situación».
A modo de ejemplo, el grupo reiteró que en el expediente se incorporan datos de acuíferos salinizados, contemplando la disposición de agua del mar cuando no es potable y, por lo tanto, no es un recurso disponible para mantener los crecimientos planteados
Memoria
Los ecologistas han recordado este lunes que en septiembre de 2022 presentaron un pliego de alegaciones al proyecto 109E/2022 de urbanización de Can Escandell, destacando su «inviabilidad ambiental» y planteando alternativas para evitar «un nuevo atentado territorial» en Ibiza.
La entidad reclamó que, antes de emitir un informe, fueran incluidos en el expediente diferentes estudios que, finalmente, no han sido incorporados.
Uno de estos documentos se refiere a la viabilidad energética real, actual y futura del proyecto. Según el GEN, en el documento se debe tener en cuenta la tendencia al agotamiento de los combustibles fósiles, la falta de proyectos relativos a las energías renovables, el incremento de la movilidad eléctrica o el descenso de las precipitaciones, entre otros factores.
En otro de los estudios no incorporados se aborda la disponibilidad real de los recursos hídricos, reclamando una evaluación completa de datos e incidiendo incluso en la capacidad de recarga puesto que no existe actualmente ningún contador que permita conocer cuánta agua se extrae de los pozos de suministro.
Otros informes que a juicio de los ecologistas deberían incluirse en el expediente se refieren a la afectación que el macroproyecto tendría para la superficie agrícola susceptible de cultivo. También se exige incorporar un trabajo sobre la capacidad de carga poblacional y turística de Ibiza con propuestas para alcanzar un grado de sostenibilidad que garantice la protección de los recursos, además de un estudio sobre la capacidad de la planta de tratamiento de residuos y el vertedero y su posibilidad de dar servicio a toda la población.
«No pueden planificarse nuevos crecimientos cuando estas instalaciones están al límite de su capacidad y no existe una alternativa planificada», puntualizaron los ecologistas.
Otro estudio importante sería el relativo al autoabastecimiento energético de la isla y al coste del tratamiento de fangos procedentes de las depuradoras de Ibiza.
Alegaciones
El pasado año, el GEN-GOB ya presentó alegaciones contra el proyecto urbanístico «salvaje y aberrante» previsto en Ca n'Escandell, donde se pretenden construir más de 500 viviendas y diferentes infraestructuras.
Según manifestaron, Ibiza es la ciudad de Baleares con una mayor densidad poblacional -y una de las más pobladas en el Estado español- a pesar de ser un territorio limitado.
Así, edificar más de 500 viviendas para unas 1.300 personas «es algo tan aberrante que no tiene nombre», lamentaron los ecologistas. Ya entonces solicitaron que se informe desfavorablemente el proyecto y se retire el plan urbanístico de manera inmediata.
«Desde el punto de vista ambiental el proyecto no se sostiene por ningún lado. Si la Comisión puede informarlo favorablemente, también puede informar de manera favorable la colocación de una bomba atómica sobre la ciudad», insistieron.