El caso de un arrendamiento que derivó en una okupación en plena milla de oro de Ibiza sigue sumando sangrantes capítulos. Así, días atrás Luc Louis Chapelle, propietario del local, se topó de bruces con la persona que presuntamente subarrendó el negocio, una mujer que a Chapelle le «vendieron» como que había fallecido. Y más madera. Chapelle advirtió que se estaban realizando unas obras y al personarse la Policía Nacional en el lugar se encontraron a dos trabajadores irregulares.
Persona «non grata». Cinco fracturas en la cara -tres del pómulo, una del tabique nasal y otra en la
cuenca del ojo-. Es el destrozo causado por el puño de Alessio Di Chirico a Omar Bouhia, la madrugada del lunes en es Pujols. El experto luchador profesional italiano arremetió a mandobles contra el taxista que acababa de llevarlo junto a su familia al hotel donde se alojaban.
Cara y cruz. Seis días después, Bouhia sigue recuperándose tras ser intervenido en Can Misses. Di Chirico continuará llevando la cruz del arrepentimiento durante un tiempo. El luchador asumió su error, pidió disculpas y asegura que sólo le propinó un golpe después de que la víctima le pusiese la mano en la cara tras una carrera con varios encontronazos. El caso se resolverá en los tribunales.
Kamikaze sobre dos ruedas. Circulando por zonas peatonales, invadiendo el carril contrario para adelantar de forma temeraria a otros vehículos y saltándose varios semáforos por el centro de Vila. Son algunas de las temeridades realizadas por un joven kamikaze sobre dos ruedas que finalmente fue atrapado entre agentes de la Policía Nacional y de la Policía Local de Vila. El cafre de 18 años sumó a todos estos delitos el hecho de circular sin carné y con una moto robada.
Atrapado con el botín. Era cuestión de tiempo y el miércoles una patrulla le identificó en la vía pública y le arrestó. En enero un vecino de Vila había denunciado el robo de un valioso patinete eléctrico, vehículo que le fue sustraído del maletero de su coche. La víctima se encontró el coche revuelto y una ventanilla forzada. Cuatro meses después la Policía Nacional cazó al autor, un joven argelino de 27 años, y recuperó el patinete.