Otra rama de importantes dimensiones se quebró este pasado jueves en Vila, cayendo sobre la avenida Bartomeu Roselló y provocando, de nuevo, un gran susto entre los vecinos y comerciantes de la zona. Cabe recordar que en pleno verano se trata de una de las vías más transitadas en toda la isla.
En esta ocasión, la incidencia tuvo lugar justo frente a la Delegación insular de Hacienda y, como ya sucedió hace dos semanas, las ramas cayeron sobre el carril bici de la avenida. «Son árboles viejos y además el calor está provocando que se rompan. Afortunadamente, en esta ocasión se trató de una rama más pequeña y, a diferencia del eucalipto, el árbol no está enfermo», explicó el concejal responsable de Jardines en Vila, Manuel Jiménez.
Estudio
Ante las diferentes incidencias que se están registrando en estas últimas semanas, desde el Ayuntamiento explicaron ayer que están a la espera de un informe a cargo de técnicos y especialistas en poda para conocer al detalle el estado de los árboles que están repartidos por todo el municipio. Dicho estudio se va a centrar principalmente en los árboles de grandes dimensiones que existen en Vila.
«El informe se centrará sobre todo en los eucaliptos, porque se han dejado crecer y llegan a tener un gran peso y un tamaño considerable», insistió el concejal.
En relación a los ejemplares de otras especies, el Ayuntamiento sí tiene previsto «dar más mimo a la jardinería de Ibiza», intensificando las acciones de mantenimiento de los diferentes árboles de la ciudad.
Cabe recordar que, hace justo una semana, una palmera de grandes dimensiones también fue talada por motivos de seguridad en la avenida de Ignacio Wallis.
«No nos vamos a arriesgar a que sucedan cosas y nos vamos a curar en salud en este sentido. Los árboles que se eliminen, se repondrán. De hecho, las zonas verdes en Ibiza van a crecer y se van a ampliar, pero garantizando la seguridad», insistió el edil.
Esta próxima semana los operarios tienen previsto intervenir en las palmeras plantadas en la avenida 8 de Agosto de Ibiza para retirar los dátiles y hojas secas y aliviar así su enorme peso. «Hay árboles que no se han podado en años y ahora habrá que reducir su tamaño», concluyó.
Cabe recordar que el mal estado de muchos árboles de Vila ya provocó las denuncias de numerosos vecinos en el verano de 2022. Según informó recientemente este rotativo, ya entonces estuvo a punto de producirse una tragedia debido al mal estado del eucalipto de la avenida Bartomeu Roselló, talado ahora para garantizar la seguridad de los ciudadanos.