«Sin matadero no habrá ganadería en Ibiza». Así de tajante se mostró el conseller Joan Simonet cuando habló del estado actual de la reforma de l'Escorxador d'Eivissa. Unas obras que, según Vicent Marí, están todavía en fase de licitación. «Solicitamos apoyo económico al anterior Govern balear, pero no tuvimos respuesta. Tras la reunión, el conseller se ha comprometido a dar soporte a la actividad ganadera a través de una colaboración directa», indicó el presidente.
Asimismo, recordó que l'Escorxador d'Eivissa tiene una inversión de casi 1,5 millones de euros, una aportación elevada que servirá para dar «nuevas oportunidades» al sector. Entre estos beneficios, Marí destacó la puesta en marcha de una línea propia para el sacrificio de conejos. «Apostamos por el producto local y el mantenimiento de la ganadería al ser una actividad económica esencial en la isla», señaló el conseller Joan Simonet, quien también se comprometió antes los medios de comunicación a participar en la financiación de las obras de reforma de este matadero que «permitirá aumentar la capacidad productiva de esta planta».
Además, indicó que esta reforma permitirá cumplir con todas las normativas actuales en materia de industrias cárnicas. «Si estamos apostando cada vez por un producto más local y más cercano, debemos corresponder con una infraestructura que esté a la altura», apuntó.