El proyecto de reconversión de la E-10 en un bulevar que una la zona de Can Misses con la ciudad está pendiente del informe preceptivo que debe emitir el departamento de Recursos Hídricos, dependiente de la Conselleria autonómica de Medio Ambiente. Así lo ha indicado el vicepresidente del Consell, Mariano Juan, quien ha recordado que la institución no podrá sacar el proyecto a concurso sin que se haya emitido este documento.
«Nosotros seguimos adelante con el proyecto», ha explicado en declaraciones a Periódico de Ibiza y Formentera, «el Ayuntamiento ha enviado un escrito diciendo que quiere que se tire adelante el proyecto original y seguimos». El vicepresidente ha señalado que, además, será aún necesario volver a revisar el proyecto con el Ayuntamiento de Ibiza con el fin de «ver qué cambios hay que hacer». Cambios que, ha aclarado, estarán relacionados con el informe de Recursos Hídricos.
Compromiso
«Es un compromiso de legislatura», ha subrayado Mariano Juan, «y no podemos permitirnos tirar por la borda todo el trabajo hecho estos años». Y es que el proyecto original fue presentado nada menos que en 2011. Una década más tarde, el Consell presentó ante el Ayuntamiento el que sería el proyecto definitivo, basado en la idea de convertir la E-10 en una calle más de la ciudad. Este proyecto contempla, entre otras cuestiones, la creación de dos carriles por sentido, un gran bulevar central, un acceso subterráneo al CETIS y la conexión con todas las calles que hoy no tienen acceso directo al primer cinturón de ronda.
Este proyecto fue aceptado por Vila en 2021. Pero un año más tarde, el entonces alcalde, el socialista Rafa Ruiz, dio marcha atrás argumentando que quería añadir un gran aparcamiento subterráneo para 1.500 vehículos entre las rotondas de ses Figueretes y Joan XXIII. La también entonces presidenta del Govern, Francina Armengol, aplaudió el cambio y se comprometió a respaldar la obra mediante su introducción en el Plan Estratégico de Inversiones de las Islas. Armengol, sin embargo, no quiso aclarar con qué dinero financiaría la misma, a pesar de que en aquel encuentro tanto ella como Ruiz cuantificaron el proyecto en 60 millones de euros.
Meses después, en octubre de 2022, Vila anunció que destinaría en los presupuestos para este año una partida de 100.000 euros para la creación de una oficina técnica responsable de la redacción del proyecto. Y ya en abril de este año, el propio Ruiz dio a conocer que el Consistorio iba a sacar a concurso esta oficina. Algo que no llegó a convertirse en una realidad y en el Ayuntamiento de Ibiza no tienen hoy constancia de que se hiciera alguna tramitación. Tampoco fue publicado ningún anuncio en la Plataforma de Contratación del Estado.
Un invento
«Es obvio que este invento que se sacaron de la chistera no hizo más que complicarlo todo», ha señalado Mariano Juan al respecto, «ha quedado claro que ni el proyecto existía, ni un anteproyecto. Ni siquiera tenían en contratación la oficina para redactarlo».
El vicepresidente insular considera que Ruiz cometió «una negligencia» al «enterrar un proyecto aprobado por el Consell por una idea que no tenía ningún papel». La institución insular, ha recordado Mariano Juan, «siempre aceptó y respetó lo que el alcalde había pedido». Pero ahora, con un nuevo gobierno en el Ayuntamiento, «ha vuelto la cordura en esta cuestión».
El proyecto de reconversión de la E-10 del Consell está presupuestado en cerca de 10 millones de euros. En el momento de su aprobación, la institución insular planteó que fuera financiado con los fondos del convenio de carreteras con el Estado. Esta vía, sin embargo, se cerró cuando el Govern de Armengol negoció con el Gobierno central un nuevo acuerdo de financiación que dio al traste con los convenios que se firmaban tradicionalmente con las instituciones insulares. Ahora será el Consell el que financie la obra con sus propios fondos: «La financiación es insular y está garantizada a pesar de que Pedro Sánchez nos está negando el dinero del convenio de carreteras».