Los gálibos del aparcamiento de es Pou Sant, en el semáforo frente al IES sa Colomina, han desaparecido. No queda ni rastro de la viga horizontal que sirve para delimitar la altura de los vehículos que pueden acceder al terreno. En un principio podría parecer que alguien los había arrancado para poder pasar con un vehículo alto, como una caravana, pero eso finalmente no ha sucedido. Desde el Ayuntamiento de Ibiza especifican que lo que ha ocurrido es que un conductor pasando por allí lo golpeó y cayó y esta persona lo está arreglando.
Los vehículos más grandes no han dudado en aprovechar la oportunidad para aparcar en es Pou Sant, donde se han podido ver varias furgonetas estacionadas.
Los gálibos pretendían permitir únicamente la entrada de los turismos en el aparcamiento disuasorio, según indicaron desde el Consistorio. Con 2,1 metros de altura, los gálibos fueron instalados entre finales de abril y principios de mayo para evitar el paso de vehículos altos, como caravanas.