Dolors Montserrat es la número 1 de la candidatura del PP al Parlamento europeo. Tras dirigir la convulsa campaña de las elecciones en Cataluña del 12 de mayo se encuentra ahora inmersa en la campaña de las europeas, que la ha traído hasta Ibiza para exponer los principales puntos de su programa electoral. Un programa con medidas como los avales del Banco Europeo de Inversiones para que los jóvenes puedan acceder a su primera vivienda o la retirada a este colectivo de la obligación de pagar impuestos durante sus primeros cuatro años de vida laboral. Montserrat tiene en el punto de mira otros problemas como el de la vivienda, que señala que se está produciendo en otros muchos puntos de la UE. Pero destaca en este sentido el trabajo que está llevando a cabo el Govern de Marga Prohens, que ha puesto ya en marcha su propia Ley de Vivienda.
—Estamos en el ecuador de la campaña para las elecciones europeas. ¿Cómo lo lleva?
—¡Bien! Muy ilusionada, con muchas ganas, haciendo pueblo a pueblo, recorriendo España y recibiendo la energía de la gente. Veo a la gente con ilusión y ganas de que el PP gane, de que defendamos el Estado de Derecho y la ley y de que hablemos también de los problemas reales que les afectan. Me refiero a agricultura, impuestos, los jóvenes, que no tienen vivienda…
—Estas elecciones parecen más un plebiscito sobre el Gobierno de Sánchez que otra cosa.
—Sobre todo, estas elecciones son para el PP, que es el más grande Europa, unas elecciones en las que nos jugamos el futuro de España. Pero es verdad que la gente está harta del manoseo que ha hecho Pedro Sánchez de las instituciones, de la crispación, de los muros, de las mentiras, de que haya entregado la gobernabilidad de España a un prófugo de la Justicia… Lo que veo es que la gente tiene ganas de salir a votar para que defendamos la ley, para que seamos el freno de la amnistía en Europa y, a la vez, que defendamos a los españoles.
—No sé en otros países de la UE pero yo tengo la impresión de que a los españoles Bruselas nos queda todavía un poco lejos.
—Hay que tener claro que el destino de España no se juega solo en las autonómicas, las municipales y las generales. Se juega también en Europa. Le pongo un ejemplo: el 70% de nuestras decisiones diarias se decide en Europa. Cuando te despiertas y enciendes la luz, la luz está regulada en Europa. Cuando abres el grifo del agua, está regulado en Europa. Cuando desayunas, esos productos alimentarios están regulados en Europa. Desde la agricultura, la ganadería, las políticas económicas, los acuerdos internacionales de comercio, el transporte público, nuestros móviles… están regulados en Europa. Yo creo que la gente cada vez es más consciente y quiere que España tenga un peso fuerte en Europa. Y eso se lo puede dar el PP, que es la fuerza más europeísta, más grande, reformista y, siempre que gobernamos, como aquí en Ibiza o en ses Illes, lo hacemos desde la centralidad y no desde el sectarismo ideológico de la izquierda.
—El CIS le da la victoria al PSOE en estas elecciones al Parlamento europeo. Al margen de las encuestas, de lo que le dicen sus asesores, cuando usted se quita el traje de política y es solo Dolors, ¿qué percibe en la calle?
—Primero, el CIS es el mayor caso de manoseo institucional de Sánchez. Ha manoseado todas las instituciones: RTVE, el Consejo de Estado, la Fiscalía, todo. El CIS siempre falla en favor de Sánchez. Trabaja para el aparato político socialista de Ferraz. Como ciudadana, yo veo mucha ilusión pero eso hay que demostrarlo en las urnas. Veo hartazgo hacia Sánchez, hacia sus mentiras, hacia sus bulos, hacia la entrega de la gobernabilidad y la igualdad entre los españoles a un prófugo de la Justicia… pero eso hay que decirlo en las urnas. Por eso hago un llamamiento para que todos aquellos que aquí en Ibiza votaron a los alcaldes, al presidente del Consell Insular, a Marga Prohens en el Govern y a Alberto Núñez Feijóo en las generales, que salgan a votar el 9 de junio. Si nos quedamos en casa, Sánchez se sale con la suya. Somos la fuerza política más grande de Europa y el PP español ha de ser decisivo dentro de este PP europeo. Cuantos más escaños tengamos, podremos defender mejor nuestro Estado de Derecho y el campo, la pesca, los jóvenes, las familias, la industria, los emprendedores, los autónomos…
—A nivel nacional, muchos tenemos la sensación de que el país es una olla a presión. ¿Estamos realmente tan mal?
—A ver, Sánchez es un político irresponsable, un político que piensa solo en él y no en la sociedad. Solo le interesa el poder y es insaciable. Mientras tanto, muchos sectores están abandonados y castigados. Él ha puesto como candidata a las europeas a Teresa Ribera (ministra de Transición Ecológica), que es la enemiga del campo, del mar y de los ganaderos. En Baleares ustedes tienen tres denominaciones de origen: aceite, miel y vino. Teresa Ribera y Sánchez han criminalizado el sector del vino. En Europa pretendían poner una etiqueta en las botellas de vino diciendo que es cancerígeno, como las etiquetas del tabaco. Todos los eurodiputados socialistas españoles votaron a favor de esto, a pesar de que significaba cargarse el sector vinícola en todas las regiones de España. Es un sector que supone 385.000 puestos de trabajo. Teresa Ribera y Pedro Sánchez son los mayores enemigos del campo, de la pesca y de todo el sector primario, que es esencial y estratégico para nosotros. Sánchez le ha dado la espalda, como al resto de españoles, y ha preferido salvar a Puigdemont.
—En 1996 la corrupción se había hecho con el PSOE. El lema de Aznar era «váyase, sr. González». Hoy parece esta corrupción llega, incluso, a la esposa del presidente, Begoña Gómez. ¿Hay algún límite para este Gobierno?
—Lo que estamos viendo es un gobierno que nos dijo a todos los españoles que jamás dejaría descansar la gobernabilidad de España en el nacionalismo. Que jamás dejaría la gobernabilidad de España en Bildu. Que jamás dormiría tranquilo si Podemos entraba en el Gobierno. Ahí están todos los de Sumar. Dijeron que jamás darían los indultos a los independentistas. Que jamás darían la amnistía y el jueves decidieron romper el Estado de Derecho y nuestra igualdad. Que jamás modificarían el Código Penal para borrar la sedición y rebajar los delitos de corrupción. Delitos para los que Europa nos está pidiendo que incrementemos las penas. Basta ya de corrupción, basta ya de impunidad. Los españoles tenemos una oportunidad única para decirle basta a Sánchez. La verdad es que la legislatura está agotada y el tiempo para Sánchez ha terminado porque han colapsado y porque él no está gobernando. No saca los Presupuestos y solo ha conseguido de sus socios la Ley de Amnistía. Es rehén de sus socios. El PP va a defender el Estado de Derecho en Europa. Somos un voto fiable y no vamos a fallar a los españoles y no vamos a defraudar.
—En lo que a la corrupción se refiere, el caso de las mascarillas es el más escandaloso. No tanto por lo económico sino porque, presuntamente, se produce mientras los españoles estábamos encerrados. ¿Confía usted en la Fiscalía europea dado que la española no parece muy confiable?
—Es terrible lo que está pasando en España. Por eso digo que el 9 de junio es una oportunidad también para que los españoles digamos basta a la corrupción que acecha en el entorno más personal del presidente, del Gobierno y del partido. Estos días hemos visto cómo la Guardia Civil dice que el exministro Ábalos sabía lo que había en el caso Koldo. Y ahora acaban de imputar al subsecretario del Ministerio de Transportes de Óscar Puentes. Sánchez entró abanderando la lucha contra la corrupción y acabará devorado por ella. Por tanto, nosotros lo que queremos es que la Justicia haga su trabajo. Vamos a respetar que haga sus procesos. La Fiscalía europea ha pedido la documentación de todo lo relacionado con las mascarillas y eso nos indica que lo de Baleares y Canarias es solo la punta del iceberg de un caso de corrupción que afecta al entorno del Gobierno y del PSOE.
—Se acaba de aprobar la Ley de Amnistía, el mayor insulto a los constitucionalistas, sobre todo los catalanes. Esto deja vía libre a Carles Puigdemont para hacer lo que quiera. Dicen que sobre la mesa hay una posible moción de censura contra Pedro Sánchez. ¿El PP sería capaz de contar con Puigdemont para esa moción de censura?
—El PP no va a ser el salvavidas ni de Puigdemont ni de Sánchez. Eso está clarísimo. El insulto es a todos los españoles, no solo a los constitucionalistas catalanes. Pero en Europa no hay nada más radical, más ultra, más extremo, que dejar descansar la gobernabilidad de España en un prófugo de la Justicia, que, además, tiene conexiones rusas con Putin. Le recuerdo que Putin es el mayor enemigo de Europa. Sánchez, además, ha entregado la igualdad de todos los españoles por siete votos. Les ha dado privilegios e impunidad, además del Código Penal. Por lo tanto, nosotros vamos a ser el freno de esto en España y en Europa. Llevamos cinco años haciéndolo en la UE. Hemos hecho una denuncia permanente y el comisario Reynders ha enviado dos cartas al Gobierno español diciendo que estaba vigilando y pidiendo al documentación de esta ley. El PP también va a elevar la denuncia contra la Ley de Amnistía, una vez que se publique en el BOE, en Europa. Sánchez no gobierna, le ha entregado las llaves de La Moncloa a Puigdemont y Puigdemont decide todo. Ahora pide la Generalitat y también el referéndum. Los independentistas son insaciables y Sánchez es insaciable con el poder, así que está claro que le va a entregar la Generalitat a Puigdemont. Nosotros no vendimos España por siete votos y nunca jamás lo haremos. Sánchez sí. Y esto le perseguirá para siempre.
—Como eurodiputada y catalana, ¿cree que la UE debe reconocer la oficialidad del catalán y del resto de lenguas cooficiales en España?
—Mi lengua materna es el catalán, pero Europa tiene muchos problemas. Tenemos una lengua común, el castellano, que es una de las lenguas oficiales de la UE. Por lo tanto, tenemos una lengua que nos une a todos los españoles. Nuestra Constitución reconoce la cooficialidad de las lenguas de nuestros territorios y la que nos une a todos es el castellano, que es una de las 24 lenguas oficiales de la UE. Sánchez y el independentismo usan la lengua para dividir y para nosotros es símbolo de convivencia.
—En las Islas se ha puesto sobre la mesa el debate de la masificación turística, que es un fenómeno que también afecta a otros destinos de Europa. ¿Preocupa esto en la UE?
—Tenéis que estar muy orgullosos de vuestra presidenta, Marga Prohens, que está haciendo un gran trabajo y que tiene encima de la mesa un proyecto y una mesa de diálogo con todos los sectores para ir avanzando juntos hacia soluciones. Soluciones de forma conjunta. No imponiendo ni yendo contra nadie. Por lo tanto, Marga Prohens usa una de las herramientas que es uno de los valores de Europa y que es el diálogo, el consenso y el acuerdo. La presidenta está haciendo lo mismo que hace la UE.
—¿Tiene la UE alguna manera de ir más allá en el reconocimiento de las islas europeas como territorios con singularidades muy específicas? En Ibiza la presencia del Estado comienza a ser escasa por temas como el del problema de la vivienda.
—Nosotros, a través de vuestra eurodiputada, Rosa Estaràs, que vuelve a ir en un puesto de salida para estas elecciones, ha estado trabajando siempre en la defensa de la especificad de la insularidad de las Islas Baleares. Esto supone defender en todos los proyectos y directivas la insularidad. Esto significa fondos para afrontar diferentes cuestiones. Desde la UE nosotros hemos pedido que las fuerzas y cuerpos de seguridad sean consideradas profesión de riesgo para que haya más fondos y capacidad para que estos profesionales puedan tener la capacidad y la posibilidad de pedir destino en las Islas. Pero tengo que recordar que quien maniobró en la UE para que esto no saliera adelante fue el PSOE.
—El problema de la vivienda se agrava día a día y no parece tener límite. ¿Puede hacer algo la UE sobre esta cuestión?
—En España, los más abandonados por el Gobierno en esta cuestión han sido los jóvenes. Nosotros llevamos como una medida estrella que los primeros cuatro años tras acceder al mundo laboral paguen cero impuestos. Queremos que ese dinero lo tengan en su bolsillo para la fianza de un primer piso, para ayudar a la entrada, para emprender un negocio, para formar familia… que puedan dedicar ese dinero a lo que realmente necesitan. Además, queremos que el Banco Europeo de Inversiones pueda avalar entre el 15% y el 20% de la entrada de la compra de un piso. En las Islas hay un problema de vivienda pero está en todas partes. Los jóvenes españoles, además, lideran la lista del desempleo en Europa. Han sido abandonados por el Gobierno y, por tanto, vamos a ayudarles. Luego hay que hablar del problema de las okupaciones. El PP defiende en Cataluña, que es un lugar donde el problema es grave, el desalojo en 24 horas y hemos presentado en el Parlament varias proposiciones de ley en este sentido. Y justamente quienes siempre han votado en contra son las izquierdas. Lo que está claro es que quien está al lado de la seguridad y luchando contra la ocupación ilegal es el PP. Nosotros defendemos principios firmes, en cuanto a la defensa del Estado de Derecho y la igualdad, y soluciones reales para los españoles. Y eso se ve donde gobernamos. Nuestros gobiernos ponen soluciones sobre la mesa, bajan los impuestos para que no haya asfixia fiscal, hacemos vivienda para los jóvenes como se está viendo en las Islas… gobernamos pensando en todos. No como Sánchez, que lo que le importa es el poder y ha entregado la gobernabilidad de España a un prófugo de la Justicia. ¿Se imagina alguien en Europa que el presidente de la República de Francia entregara la gobernabilidad a un prófugo de la Justicia? ¿O el canciller socialista de Alemania? Esto es lo más radical y extremo que hay en Europa y la única respuesta a esta deriva de Sánchez es el PP.