El GEN-GOB ha considerado este domingo "un avance importante" que se destinen parte de los recursos del impuesto turístico (ecotasa) a proyectos medioambientales, aunque "desgraciadamente todavía son un apartado minoritario en este tipo de dondos, cuando debería dedicarse el 100% a estos fines".
"La mitad de los más de 90 millones de euros del impuesto turístico se dedican a incrementar la capacidad de carga hídrica para usos urbanos y turísticos, incluyendo la explotación de acuíferos o nuevos emisarios (desperdicio de agua depurada que se vierte en el mar). Otra parte del fondo va a proyectos que en ningún caso deberían obtener financiación mediante este impuesto, como es el caso del Palacio de Congresos de Santa Eulària, el patrocinio de eventos deportivos (como modalidad turística), el recinto ferial, campos de fútbol, etc", han señalado.
El GEN-GOB espera que el presupuesto otorgado este año para el control de especies invasoras, especialmente serpientes, tenga continuidad en ejercicios posteriores para garantizar posibilidades de éxito. "Recordemos, también, que finalmente se han atendido las demandas de incluir la lagartija en el catálogo de especies amenazadas, lo que obliga a la realización de planes de conservación de la especie, protegida por directivas europeas. Aún así seguimos sin tener una ley de bioseguridad que proteja la biodiversidad de las islas y, sin ella, no podemos resguardarla", han explicado.