Sant Josep ha capturado 800 serpientes en el marco de la Campaña de Control de Ofidios del municipio, desde 2021. El Ayuntamiento ha apuntado que son «muy conscientes de la necesidad de proteger la lagartija pitiusa de las amenazas presentes en el municipio, entre las que pueden destacar la pérdida de hábitats, la fragmentación del territorio, el cambio climático o la presencia de especies invasoras depredadoras».
Una de estas especies invasoras ha sido las serpientes, que desde hace casi dos décadas se han ido extendiendo por la isla de Ibiza y actualmente se detectan en casi todo el territorio. Ante el impacto de la presencia de serpientes sobre la población de lagartijas, en 2023 se aprobó el Decreto ley 1/2023, de medidas extraordinarias y urgentes para la protección de la lagartija de las Pitiusas (Podarcis pityusensis) y la lagartija balear (Podarcis lilfordi). Entre otras medidas, el decreto establece restricciones para la entrada de determinados árboles en las islas, a fin de minimizar la llegada accidental de serpientes mientras invernan en los troncos. Asimismo, cataloga la lagartija de las Pitiusas como amenazada, en la categoría de vulnerable.
En sintonía con las medidas adoptadas por otras administraciones, el Ayuntamiento de Sant Josep, a través de la concejalía de Medio Ambiente, Sostenibilidad y Litoral, también quiere colaborar en esta lucha en la medida de sus posibilidades.
La colaboración con la Sociedad de Cazadores de Sant Josep pretende aprovechar la experiencia y conocimiento de este colectivo del territorio del municipio y la disponibilidad de los terrenos de sus socios para la ubicación de trampas en zonas estratégicas.
Por ello, se han instalado trampas de serpientes en las zonas rústicas del municipio, en terrenos de los miembros de la sociedad de cazadores, para capturar el máximo de serpientes posibles durante la época en que éstas están más activas.