En un día marcado por las celebraciones del Día del Carmen en algunos puntos de la isla -como es Cubells o Sant Antoni -, el viento se ha alzado como protagonista. Y es que desde buena mañana, a partir de las 10.00 horas, ha estado soplando con fuerza tanto en Ibiza como en Formentera, alcanzando rachas de viento norte cercanas a los 50 kilómetros por hora.
Estas fuertes rachas se han mantenido a lo largo de la mañana, incrementándose incluso con el paso del tiempo. Así, entre la una y las dos del mediodía las máximas alcanzaban cerca de los 70 kilómetros por hora de viento norte-noreste. Sin embargo, y a partir de las tres, estas fuertes rachas han ido decayendo poco a poco.
Pese a que se han seguido alcanzando rachas de nuevamente hasta 50 kilómetros por hora, la tendencia es a la baja. Se espera que siga frenando hasta que finalmente, por la noche, quede una brisa que difícilmente llegará a más de 30 kilómetros por hora.
Afortunadamente, por el momento no se han reportado incidencias como consecuencia del fuerte viento que ha golpeado las Pitiusas. Sin embargo, sí que se ha tenido que suspender la procesión marinera de la Virgen del Carmen en Es Cubells. La de Sant Antoni sí se espera que pueda realizarse con normalidad esta misma tarde.
Las altas temperaturas
Además de la furia del viento, la jornada de domingo ha estado marcada por el calor. Las Pitiusas son las islas que han registrado las temperaturas máximas más altas de toda Baleares, destacando sobre el resto los 34 grados de Formentera. En Ibiza, Vila ha llegado a los 33 grados centígrados, el aeropuerto a los 32 y el resto de municipios a los 31 grados.
Pese a la ausencia de incidencias por viento y calor, Bomberos de Ibiza han querido recordar que días como este domingo son especialmente peligrosos por la «regla de los 30». Esta se basa en tres indicadores que muestran el aumento de la peligrosidad de los incendios: si hay más de 30ºC de temperatura, si la humedad relativa es inferior al 30% y si las rachas de viento superan los 30 kilómetros hora.