Un portal inmobiliario publica un anuncio de venta de parte de la finca rústica donde están ubicadas las ruinas de Cala d’en Serra. En este sentido, en la web de Aliseda Inmobiliaria se puede ver el anuncio en el que se presenta como una «espectacular parcela ubicada en centro Cala d´en Serra, en Sant Joan de Labritja, Islas Baleares. Se trata de un terreno de clase rústica y uso agrario. Cuenta con 83.222 m2 y un enclave privilegiado, frente al mar. Una oportunidad única para inversores». En concreto, se vende la parcela 35 del polígono seis. El precio de venta, según se refleja en el citado anuncio, es de 298.870 euros y ha bajado un 5%, pues inicialmente se puso en venta por 314.600 euros, según se refleja en el anuncio.
Cabe recordar que en diciembre de 2023, el Ayuntamiento de Sant Joan declaró la nulidad de la licencia de obras concedida en 1975 para la construcción de un complejo hotelero en Cala d’en Serra, proyectada para albergar 198 apartamentos de 598 plazas ideada por el arquitecto Josep Lluís Sert en colaboración con Raimon Torres. La caducidad de esta licencia también implica «la incoación del correspondiente expediente para restablecer el orden urbanístico infringido por las obras inconclusas de las que deberá responder el actual propietario». Es decir, que los dueños del terreno donde están las ruinas del complejo turístico deberán tumbarlas para devolver la zona a su estado natural.
En este punto es preciso señalar que el pasado mes de julio, el Consistorio joaní aprobó en pleno y por unanimidad pedir al Consell d’Eivissa la compra del solar. En ese momento, la alcaldesa de Sant Joan, Tania Marí, destacó «la especial importancia de garantizar la recuperación de este espacio y su conservación, así como asegurar una gestión coherente con las protecciones de las que goza y, además, garantizar que, a largo plazo, el uso al que se destina el terreno sea el de la conservación del hábitat y especies que en ellas existen, siendo esencial la prevención de incendios forestales y la preservación de la fauna presente». Tras la caducidad de la licencia, el Ayuntamiento de Sant Joan llegó a un acuerdo con el Consell para que sea la administración insular la que adquiera dicho terreno para proceder al derribo de la estructura en un menor plazo. A principios del pasado mes de diciembre, el Consell Executiu aprobó el listado de expropiaciones de los terrenos donde se ubica esta ruina.
En paralelo, el Govern declaró el derribo de estas ruinas de utilidad pública en el decreto de simplificación administrativa, lo que ahorra más de un año de tramitación.