El Consell de Ibiza y los cinco Ayuntamientos se han reunido con la empresa púbica Red.es, dependiente del Ministerio para la Transformación Digital y la Fundación Pública, que dirige Óscar López, para expresarles el malestar y descontento que suscita el mal funcionamiento de la mayoría de componentes del proyecto Smart Island y que, según informa el ente estatal, debería finalizar en junio de 2025.
«Aunque teóricamente estamos en la fase final de implementación del Proyecto, la realidad es que en las calles de nuestros municipios, la contrata adjudicada por Red.es no ha sido capaz de arreglar los problemas de conectividad de los tótem de información del transporte público, ni de hacer funcionar las pantallas que informan de la capacidad de los aparcamientos, y el estado en el que se encuentra, se aleja de ser la isla inteligente que se pretendía con este proyecto», ha manifestado el director insular de Nuevas Teconologías, Javier Torres.
En este sentido, el director insular ha detallado, componente a componente, las numerosas deficiencias que el proyecto ejecutado por el Ministerio presenta a poco más de un mes de, teóricamente, dar por concluidos los trabajos: «actualmente los 160 tótems de información del transporte público no funcionan, a pesar de las numerosas reuniones mantenidas. Hay un problema que Red.es tiene que resolver», ha lamentado Torres.
Igualmente, «los paneles de información del estado de los aparcamientos también presentan deficiencias, por ejemplo hay algunas que directamente se han instalado en lugares o no hay posibilidad de poner luz eléctrica. Además, hay aparcamientos que tienen diferentes entradas y se han colocado sensores solo en una», ha lamentado el director insular, quien cree que la empresa adjudicataria «nunca ha sido consciente de la importancia que este proyecto tiene para la isla de Ibiza».
En cuanto a los sistemas de controles de aforos de playas, «no están en funcionamiento todas las cámaras y llevamos mucho tiempo esperando información por parte de la adjudicataria sobre cuál es la empresa que se debería hacer cargo de los equipos que todavía podrían estar en garantía».
No solo esto, también hay problemas con la App de Ibiza Smart Island para móviles, una aplicación que «teniendo un calibre importante turístico, no se había previsto por parte de la adjudicataria traducirla al inglés y que, incluso, a un mes y medio de acabar la licitación, no se puede ni siquiera descargar desde las plataformas Android o iOs, a pesar de que tiempo atrás había llegado a estar disponible».
En definitiva, desde el Consell de Ibiza se pide «seriedad a la adjudicataria y más contundencia en Red.es, quien asumió la responsabilidad de convertir Ibiza en todo un referente en el mundo de la inteligencia turística y que, por culpa de una mala ejecución, puede quedar muy mal alejada de aquellas aspiraciones que como isla mantenemos».
“Smart island” es un eufemismo para ocultar el espíritu de control y recaudación a base de multas. Nos tenéis hasta los cojones.