La Plataforma Hay soluciones para el vertedero de Ibiza ha enviado un escrito al Consell para poner de manifiesto las «carencias y debilidades» del proceso de participación pública iniciado el 31 de marzo para decidir el futuro de la gestión de los residuos no reciclables.
En un comunicado, desde el colectivo han explicado que, tras analizar la metodología propuesta y los datos facilitados, la plataforma ha hecho llegar a la institución sus observaciones sobre la falta de información, los criterios subjetivos, la debilidad de los datos sobredimensionados de residuos y la falta de rigor del método utilizado, que pueden «desvirtuar» el proceso para elegir entre el traslado definitivo de los residuos a Mallorca y la construcción de una incineradora en Ibiza.
En primer lugar, la plataforma ha destacado la falta de información sobre la posible ubicación de la planta incineradora y sobre la extensión del territorio que ocupará. También indica que los datos sobre la previsión futura de la cantidad de residuos no reciclables a tratar están sobredimensionados y fuera del cumplimiento de la normativa vigente en materia de prevención y gestión de residuos en España ya que no reflejan la reducción que exige la normativa española que obliga en 2035 a reciclar el 65 por ciento de los residuos y que prioriza la prevención y la recogida selectiva, relegando el vertido y la incineración como últimas opciones.
Todo esto supondrá que la fracción de rechazo sea mucho menor que las estimaciones aportadas por el Consell de Ibiza, han señalado desde la plataforma. En tercer lugar, se ha considerado que sólo se conoce la tecnología empleada en la planta incineradora de Tirme en Mallorca, pero no la que se utilizará en Ibiza dado que no existe ni un anteproyecto o proyecto básico de la planta que se propone construir.
Asimismo, añade que mientras para el transporte de residuos se incluye información detallada sobre la logística asociada, para la construcción de la incineradora no se ofrecen datos concretos ni se considera la huella de carbono producida por la fabricación, transporte, construcción y operación de la planta incineradora, lo que impide valorar ambas opciones de manera objetiva.
En cuanto a los datos económicos, desde la plataforma han advertido de que son «insuficientes y sesgados» puesto que, al estar sobredimensionada la cantidad de residuos a tratar, el rechazo a transportar o a incinerar será muchísimo menor, por lo que todos los cálculos de costes están sobrevalorados y malinterpretados.
Este «sesgo» de información impide a los participantes en el proceso hacer una valoración adecuada de las alternativas ya que, si se reduce la cantidad de rechazo a tratar, los costes de transporte e incineración en Mallorca disminuirán, mientras que los de la incineración en Ibiza aumentarán por tonelada tratada, ha alertado el colectivo.
Tienen toda la razón. Lo fundamental sería saber de qué volumen de residuos estamos hablando y dónde estaría ubicada la planta en la isla, así como su dimensionamiento...Lo más lógico, y dadas las reducidas dimensiones de la isla, es que se trasladen a Mallorca y que se implanten medidas para un mayor reciclaje aquí (con el dinerito de la ecotasa qué se queda en Mallorca...algo podríamos hacer ...)