Ibiza cuenta con más de 80.000 plazas turísticas legales, distribuidas entre diferentes tipos de alojamientos como hoteles, apartamentos, campings y viviendas particulares que cuentan con licencia oficial. Estas plazas se ajustan a la normativa vigente, lo que garantiza que cumplen con unos estándares mínimos de calidad y seguridad para los visitantes. Además, al estar reguladas, estas plazas turísticas legales tributan y pagan impuestos, lo que repercute directamente en los servicios públicos de la isla. Esos ingresos contribuyen a financiar áreas esenciales como la sanidad, la educación o la seguridad, servicios clave para residentes y turistas.
Sin embargo, el enorme atractivo turístico de Ibiza y la elevada demanda durante la temporada alta han favorecido la aparición de una oferta alternativa y completamente irregular: el alquiler turístico ilegal. Se trata de alojamientos que se ofrecen sin ningún tipo de autorización oficial, sin supervisión administrativa y, lo que es más grave, sin generar ningún tipo de beneficio colectivo. Esta actividad no solo evita pagar impuestos, sino que además contribuye directamente a la saturación y masificación que sufre la isla, especialmente durante los meses de verano, afectando negativamente a la calidad de vida de los residentes y a la experiencia de los visitantes.
Pero ¿qué se considera exactamente alquiler turístico ilegal?
En Ibiza, se considera alquiler turístico ilegal cualquier tipo de vivienda que se alquile por días o por periodos cortos y que no esté registrada oficialmente en el censo de alojamientos del Consell d’Eivissa. Esto incluye una gran variedad de alojamientos: desde casas o chalets hasta opciones más improvisadas como caravanas, tiendas de campaña, tipis o incluso construcciones que no cumplen con los requisitos mínimos de habitabilidad. Si estos espacios no cuentan con la autorización correspondiente, están incurriendo en una actividad ilegal.
Es importante aclarar que el alquiler por temporada, es decir, el alquiler de pisos o habitaciones por meses, no entra dentro de esta categoría. Este tipo de alquiler está regulado por la normativa estatal y no puede ser fiscalizado por el Consell Insular, ya que se enmarca dentro de un régimen diferente al del uso turístico.
Hay algunos indicios claros para saber si un alquiler turístico es ilegal:
- En Ibiza, todos los alquileres turísticos en edificios plurifamiliares (pisos) son ilegales. Esto quiere decir que ningún apartamento situado en un bloque de viviendas puede alquilarse legalmente para estancias cortas o vacacionales.
- Tampoco está permitido alquilar habitaciones sueltas dentro de una vivienda. La normativa prohíbe esta práctica para evitar la conversión de espacios residenciales en alojamientos turísticos encubiertos.
- Las caravanas, tiendas de campaña, tipis u otros alojamientos no convencionales solo pueden ofrecer alojamiento turístico si forman parte de un camping autorizado y legalmente constituido.
Para comprobar si una vivienda dispone de licencia turística en Ibiza, el Consell d’Eivissa ha habilitado una web oficial donde cualquier persona puede hacer la consulta: registreturistic.conselldeivissa.es.
Si se sospecha de un posible caso de actividad ilegal, lo recomendable es denunciarlo a través de los canales habilitados, como la aplicación Línea Verde del ayuntamiento correspondiente o directamente desde la web oficial: conselldeivissa.es/denuncia.
En lo que va de año, el Consell d’Eivissa ha conseguido detectar y retirar de las plataformas de internet casi la mitad de las ofertas ilegales que estaban activas. Las personas responsables de estas actividades ilícitas se enfrentan a sanciones severas: por la vía turística, las multas pueden llegar hasta los 500.000 euros, y por la vía urbanística, pueden alcanzar hasta el 75% del valor del inmueble que se ha utilizado de forma fraudulenta.
En Ibiza no hay lugar para la permisividad ni la impunidad. Los sistemas que detectan y controlan la oferta turística ilegal están plenamente activos y funcionan de forma eficaz. Son cientos los infractores que ya han sido localizados y sancionados, y a quienes todavía no se ha localizado, se les advierte: tarde o temprano serán identificados y se actuará contra ellos aplicando todo el peso de la ley y de la normativa vigente.
Esta información forma parte del Plan de Choque contra el intrusismo turístico en la isla de Ibiza, un proyecto liderado por el Consell Insular d’Eivissa. Su objetivo principal es reducir la masificación turística, garantizar un equilibrio sostenible y proteger la calidad de la oferta turística legal para preservar el modelo de desarrollo de la isla a medio y largo plazo.
El Plan de Choque es uno de los muchos proyectos financiados por el Impuesto de Turismo Sostenible (ITS) que gestiona la Comunidad Autónoma de las Illes Balears. Este plan se ejecutará en tres fases y cuenta con un presupuesto total de 22.275.815 euros, destinado a su desarrollo entre los años 2025 y 2027. Para más información sobre este y otros proyectos relacionados con la sostenibilidad turística, se puede visitar la web: www.illessostenibles.travel