Los Consells de Ibiza y Formentera rechazaron este viernes las «amenazas» del Gobierno de no transferir los fondos necesarios para la atención a los menores migrantes no acompañados si las instituciones se niegan a acoger a jóvenes procedentes de otras comunidades.
Desde el Consell d´Eivissa expresaron su «rotundo rechazo» al intento de condicionar la financiación a la aceptación del traslados de menores «sin consenso, coordinación o recursos suficientes». La consellera de Bienestar Social, Familia e Igualdad, Carolina Escandell, consideró «intolerable que el Gobierno utilice a los niños como moneda de cambio política y que se pretenda derivar menores a unas islas donde los servicios están ya desbordados».
Escandell recordó que Ibiza registra una ocupación del 231,25% en las plazas destinadas a los menores migrantes. Este año se han multiplicado por cuatro estas plazas y se sigue trabajando para habilitar más espacios puesto que la previsión es registrar un aumento exponencial y constante en cuanto a la llegada de estos menores. «Estas cifras son insostenibles y demuestran que el sistema de acogida en Ibiza está en una situación límite», manifestó la consellera.
El Consell aseguró que la protección de los derechos de los niños y adolescentes sólo puede llevarse a cabo de manera responsable si se dispone de una financiación estable, una planificación coordinada y una lealtad institucional real. La consellera, de esta manera, exigió al Gobierno que transfiera de inmediato los fondos y reclamó criterios <> para el reparto territorial de estos menores.
«No podemos aceptar que se deje fuera del reparto a territorios como el País Vasco o Cataluña sin ninguna explicación, mientras que otras comunidades como Baleares sufren una presión constante debido a su situación geográfica y a la negativa del Gobierno de Pedro Sánchez de reconocer la ruta migratoria», afirmó Escandell.
La institución reiteró que no aceptará traslados impuestos ni recortes en los recursos pactados y exigió al delegado del Gobierno en Baleares que traslade al Ministerio la gravedad de la situación en Ibiza.
También desde Formentera, la consellera de Bienestar Social, Cristina Costa, rechazó la «amenaza» del Ministerio y calificó la estrategia como «un chantaje institucional inaceptable».
«No se han explicado los criterios de reparto ni cómo se articularán los traslados. Hablamos de una cuestión de infancia, no de una negociación política», afirmó.
Desde Formentera señalaron que su sistema de protección es «limitado y estructuralmente frágil», por lo que asumir nuevos traslados sin una financiación estable comprometería la calidad y continuidad del servicio.
«Los derechos de los menores no pueden convertirse en moneda de cambio en una pugna institucional», insistió Costa.
Al igual que Ibiza, el Consell de Formentera exigió al delegado del Gobierno que traslade a Madrid esta problemática y reclame una respuesta estatal «a la altura del reto humanitario» que supone la llegada de menores migrantes no acompañados, reclamando también un sistema de reparto equitativo y sin la exclusión arbitraria de territorios.
El Govern
En esta misma línea también se pronunció el Govern, quien tildó de «chantaje» que el Ejecutivo central condicione una ayuda de dos millones de euros a que acoja a niños y adolescentes migrantes no acompañados llegados a otras comunidades cuando las islas ya han superado con creces la capacidad de sus centros de atención a menores desprotegidos. «Estamos al límite», explicó este viernes el portavoz del Ejecutivo autonómico, Antoni Costa, quien afirmó que los centros de menores de los Consells Insulars sufren una sobresaturación del 1.000 %.
El portavoz recordó que en lo que va de año han llegado a Baleares en pateras «más de 3.000 migrantes irregulares (3.363, según los datos de la Delegación del Gobierno)», y reseñó que estas cifras más que duplican las de 2024 por las mismas fechas.
«Es, por tanto, prácticamente un insulto que se nos quiera imponer un reparto que no mira por las Islas Baleares», enfatizó el conseller, quien puso de manifiesto que los dos millones de euros que el Gobierno amenaza con no transferir apenas representan la mitad del coste que está asumiendo para acoger a los menores migrantes el Consell de Formentera.
«Este Govern no quiere que estas islas tengan el mismo problema que Canarias y la tendencia es inequívoca» mientras el Gobierno central «no está haciendo absolutamente nada». Costa se preguntó por qué Pedro Sánchez no negocia medidas para frenar la salida hacia España de pateras de Argelia como ha hecho esta semana durante un viaje a Mauritania.
Al final ¿en qué quedó la cosa?? Se bajaron los pantalones otra vez o se plantan con un NO