El sector de la restauración en Ibiza y Formentera acusa los efectos de una temporada que no está siendo tan positiva como se esperaba al principio. En Mallorca, la patronal CAEB Restauración ya ha advertido de que este año los establecimientos del sector tienen menos clientes, con caídas en la facturación en algunas zonas de la isla de hasta el 40 %.
En ese destino el sector ha expresado su gran preocupación y ha llegado a asegurar que numerosos restaurantes podrían acabar cerrando debido a los resultados registrados este año.
En relación a las Pitiusas, el presidente de Pimeef Restauració, Miguel Tur, señaló ayer que, en general, no está siendo una buena temporada. «Por ubicación o tradición, hay restaurantes que van a seguir funcionando muy bien y puede ser que antes tuvieran mucha cola para conseguir mesa y ahora no la tengan, aunque siguen llenando. Por otra parte, para el común de los mortales no está siendo una temporada muy buena. En los últimos años, aunque se registran récords de llegadas en el aeropuerto, los turistas han reducido sus estancias y además son otro tipo de visitantes», consideró Tur.
El incremento de precios ha provocado que principalmente el turismo familiar esté siendo reemplazado por viajeros que vienen a Ibiza menos días y con otros planes. «En el gasto los restaurantes reducen facturación, pero también porque el turismo está cambiando. A nivel general, no está siendo una buena temporada para la restauración», reiteró.
En relación a posibles cierres de restaurantes, Tur reconoció que todos los años se producen estas situaciones debido a distintos factores como pueden ser los alquileres de los locales o la falta de personal. «Este año podría aumentar este hecho un poco más. Puede haber una tendencia, pero no un descalabro tremendo como auguran en Mallorca. Sí que a los pequeños restaurantes cada vez les cuesta más sobrevivir y de ahí que vengan cierres. Hay que tener también en cuenta el incremento de costes y la presión fiscal. Todo provoca que sea más difícil mantenerse en pie, más si se añade una reducción en las ventas», afirmó el presidente, quien puntualizó que no hay zonas concretas en las Pitiusas que resulten más afectadas por esta realidad.
Otro hecho a destacar, según Miguel Tur, es la falta de relevo generacional en algunos casos concretos, provocando también cierres de restaurantes tradicionales muy conocidos.
En cuanto a los precios de las consumiciones, el presidente reconoció que han seguido subiendo debido al incremento de costes, aunque puede hablarse de subidas «moderadas» y en menor medida que en años anteriores. «Muchos empresarios han absorbido el incremento de costes vía reducción de la rentabilidad», concluyó.
La isla se está convirtiendo en un infierno hortera en el que te estafan en todos los sitios. Han destrozado la gallina de los huevos de oro y ahora lloran.