Jack Kay es un ciudadano británico que hace pocos días visitaba Ibiza para disfrutar de sus vacaciones. A sus 26 años, él se considera «un tipo normal de Newcastle». Pero Internet tenía otros planes para él.
Fue grabado bailando en un local de Ibiza durante una fiesta diurna el pasado 3 de agosto. Entonces, su vida cambió para siempre. El vídeo, titulado 'Ibiza Final Boss' ('el Jefe Final de Ibiza', en el argot de los videojuegos), rompió récords en pocas horas, acumulando millones de visitas. Desde ese momento la comunidad online ha conspirado para conformar el lore del personaje, atribuyéndole características sobrenaturales y generando la leyenda que rodea a todo 'jefe final'.
¿Por qué tanto interés? Bien sencillo: su peinado semiesférico, su barba de candado perfectamente recortada, sus enormes gafas de sol, sus tatuajes, sus dientes blanqueados, su físico... toda su apariencia y, sobre todo, su actitud y naturalidad, conforman el arquetipo del imaginario colectivo de un 'guiri' típico, pero con sus características más definitorias exacerbadas hasta el punto de convertirse en el más guiri de los guiris, el 'Ibiza Final Boss'.
MixMag Spain, The Independant, The Sun, The Mirror, Daily Mail... Decenas de medios de todo el mundo se han hecho eco de su aparición en las discotecas ibicencas. Todo el mundo quiere saber de él. Hasta el momento, Jack ha mantenido sus comunicaciones al mínimo, aunque ha revelado algunos detalles de su vida: su pareja, Alisha Cook, de 23 años, ha revelado ser la pareja del Boss y ha publicado fotos en sus redes sociales bajo el título «POV: tu novio ahora es conocido como el Ibiza Final Boss».
El mundo de la publicidad y las relaciones públicas hace ya años que sabe aprovechar el tirón de influencers y celebridades de Internet. Desde su salto a la fama el pasado domingo, el teléfono de Kay no ha parado de sonar. Apenas cuatro días después, la agencia de relaciones públicas Neon Management, que representa a influencers y famosos del Reino Unido, lo ha fichado y le ha ofrecido un contrato millonario.
Según el periódico británico The Sun, la agencia ya está inundada de peticiones para invitar al Ibiza Final Boss a programas de televisión, podcasts y series. También sugieren que, entre todas las estrellas que trabajan en la agencia, Jack es «su activo más importante».
Kay ha tenido tiempo de volver a su ciudad natal, Newcastle, por un día, para recortarse la barba y el pelo antes volver a la isla. Ahora Ibiza Final Boss vuelve al lugar que lo hizo famoso, esta vez con un personaje a su medida, invitado por las más grandes discotecas de la isla, con lo que se espera que lo volvamos a ver próximamente en los clubes de la isla.
Qué maravilla de turismo...