La isla de Ibiza se encuentra en alerta por sequía puesto que las reservas hídricas el pasado mes de agosto descendieron del 29% al 27%. Sin embargo, deben pasar dos meses para que se comiencen a aplicar las medidas contempladas por el Govern en su Plan Especial de Actuación en Situaciones de Alerta y Eventual Sequía de Baleares que data de 2017. «También tendrían que pasar dos meses consecutivos para que se declare la sequía porque ahora estamos en alerta.
Desde la Alianza por el Agua vemos insuficiente este procedimiento administrativo porque la realidad es mucho peor que los escenarios planteados», afirmaron.
La entidad alertó de que, según el Plan Especial, pasará el verano y «no se aplicarán todas estas medidas urgentes que llevamos pidiendo desde hace meses».
En relación a Ibiza, y en base al Plan Especial de Actuación, el Ejecutivo autonómico contempla una serie de actuaciones operativas que las entidades gestoras del suministro tienen la obligación de seguir. Entre ellas, deberán intensificar las campañas de concienciación de ahorro, aumentar el uso de aguas regeneradas hasta la máxima capacidad y poner en funcionamiento los pozos de garantía.
Aquellas entidades gestoras con conexión a desalinizadoras deberán usar agua desalada al máximo de la capacidad de suministro de la infraestructura e iniciar restricciones de consumo de agua. Las que no tengan conexión a desalinizadoras deberán continuar o ampliar las restricciones obligatorias, tales como limitar el riego de jardines. Entre otras actuaciones contempladas para el estado de sequía, los regantes con concesión para regar con aguas subterráneas tendrán la obligación de limitar el consumo, mientras que también las viviendas aisladas con pozo propio tendrán la obligación de reducir un 20% el gasto de agua.
La Administración competente en materia de turismo tendrá que comunicar el estado de alerta por sequía a los establecimientos turísticos ubicados en las unidades de demanda afectados. La Alianza explicó que, en un escenario de prealerta por sequía, ya se indica que el consumo en rústico debe reducirse un 10%, pero dudó de que alguien haya controlado esta cantidad. Por tanto, cuando deban comenzar a aplicarse las medidas antisequía, la entidad reconoció temer que esa reducción del consumo del 20% en las viviendas en rústico difícilmente se vaya a controlar.
Ante la situación actual, la Alianza por el Agua exigió, entre otras acciones inmediatas, un mayor control de los grandes consumidores en los pozos a través del uso de contadores digitales o bien a través de celadores y personal de la Administración.
Ayuntamientos como el de Santa Eulària recordaron ayer que, ante esta situación de alerta por sequía, trabajan desde hace tiempo en el uso racional del agua, con un Plan de Gestión Sostenible en vigor. Ya durante la prealerta, el Consistorio anunció en los meses centrales de la temporada la limitación del suministro a grandes consumidores, lo que ha permitido ahorrar casi 50.000 m3 de agua desde hace dos años.
Además, en Santa Eulària las duchas y lavapiés en las playas del municipio han permanecido cerrados durante el verano, mientras que las fuentes, de circuito cerrado, han seguido funcionando puesto que no necesitan una inyección de agua para estar en activo.
En el municipio de Ibiza, el concejal responsable Jordi Grivé también aseguró que en el Ayuntamiento no han esperado a que oficialmente se declare esta alerta por sequía y han venido trabajando en esta cuestión desde hace tiempo. En primer lugar, han ‘desatascado’ una contrata que llevaba más de diez años sin inversiones.
«También, hemos sido pioneros en un proyecto de sellado de filtraciones de agua de mar para que ésta llegue a la depuradora en condiciones de ser reutilizada. Hemos aprovechado el agua de los niveles freáticos que se bombeaba al alcantarillado desde un parking, controlando mucho los consumos municipales», concluyó. Vila, además, ha suspendido la extracción de agua de los pozos.
ClaudiaAsí es .. mucho discurso y poca acción contundente. Este es el presidente de un chiringuito más.