El presidente de Baleària, Adolfo Utor, ha asegurado este lunes que la nueva normativa de limitación de entrada de vehículos en Ibiza y Formentera ha tenido un impacto «mínimo» sobre el tráfico de la isla, pero «muy significativo» para el transporte marítimo. Según los datos presentados por la compañía, entre el 1 de junio y el 30 de septiembre de 2025 dejaron de llegar a Ibiza 15.800 automóviles, lo que equivale a una reducción del 25 % respecto al mismo periodo del año anterior. Sin embargo, el efecto medio sobre la circulación habría sido de sólo 248 coches menos al día. Durante una comparecencia celebrada para hacer balance del verano, Utor ha explicado que Baleària encargó dos informes para evaluar los efectos de la norma: uno técnico, elaborado por la empresa Meteoclim - vinculada a la Universidad de las Islas Baleares y especializada en estudios estadísticos y geográficos-, y otro de carácter jurídico. Ambos documentos, que la naviera ha aportado también a los procedimientos judiciales en curso, sostienen que las restricciones no han reducido de manera apreciable la saturación de las carreteras ibicencas.
Datos oficiales
Basándose en cifras del Instituto de Estadística de las Islas Baleares (Ibestat), el presidente de Baleària ha señalado que el tráfico marítimo con Ibiza, excluyendo la línea con Formentera, se ha mantenido prácticamente estable en los últimos años. En 2008, un total de 736.000 pasajeros viajaron en barco hacia la isla -sin contar los trayectos interinsulares-, una cifra que apenas ha descendido un 3 % en el último ejercicio. En cambio, el transporte aéreo hacia Ibiza se ha duplicado en el mismo periodo, pasando de unos 4,6 millones de viajeros a alrededor de nueve millones. «Si la saturación de las carreteras viene dada por los coches y los coches son proporcionales al número de visitantes, es evidente que el transporte marítimo no ha sido el responsable del incremento del tráfico», ha argumentado Utor, resaltando que el aumento se debe a la llegada de más pasajeros en avión, que en su mayoría alquilan vehículos para desplazarse.
Según la compañía, no existen datos públicos sobre el parque de coches de alquiler activos en la isla, pero su evolución sería paralela al crecimiento del tráfico aéreo. Baleària estima que el número de vehículos de alquiler podría haberse duplicado en los últimos quince años. Utor ha destacado también el incremento demográfico y del parque móvil de Ibiza como factores determinantes en la saturación viaria. En los últimos 20 años, ha precisado, la población residente ha aumentado un 90 %, y el número total de vehículos - incluyendo coches, motos, bicicletas y furgonetas- lo ha hecho en un 150 %. El estudio de Meteoclim muestra también diferencias en la estacionalidad entre ambos modos de transporte. Mientras que el marítimo mantiene un flujo relativamente constante durante todo el año, con una leve subida en julio y agosto, el tráfico aéreo presenta una marcada concentración en los meses de verano, según ha indicado.
«Castigar al transporte marítimo, que apenas ha crecido y que tiene una estacionalidad mucho menor, no parece una medida racional ni justa», ha insistido. Entre junio y septiembre de 2025, Baleària registró 15.800 vehículos menos transportados hacia Ibiza, lo que representa una reducción del 25 % respecto al año anterior. Esa caída, ha agregado, se observa en todas las rutas que conectan la isla con la Península (Barcelona, Dénia, Valencia) y también en las líneas interinsulares con Palma y Formentera. De acuerdo con los cálculos de la compañía, esa cifra equivale a unos 7.900 automóviles que dejaron de circular por la isla durante el verano. Con una estancia media de 3,84 días por vehículo, el impacto diario sobre el tráfico se traduce en un promedio de 248 coches menos en circulación. «En algunos días el efecto pudo llegar a 500 vehículos, y en otros descender a 150, pero el promedio es de 248», ha precisado Utor.
Por mí Balearia y si presidente se pueden ir a un sitio bien lejos, como todos aquellos que ponen pegas a que hayan estas restricciones más que necesarias; ahora bien, la verdad es que no deja de ser cierto lo que dice, esta restricción ha sido más una patraña que otra cosa pq ha sido cobarde y apenas se ha notado nada en el tráfico de este verano; mucho ruido y pocas nueces