Primero fue la reducción de efectivos en los cinco puntos de vigilancia que se establecieron para controlar las entradas y salidas de sa Penya. Luego, al inicio de la temporada turística, Comisaría eliminó una de las zonas que eran controladas las 24 horas del día. A finales de junio, la presencia estática de policías en las calles que fueron asignadas era nula. La »Operación Esperanza», tal y como se diseñó para acabar con los traficantes de este barrio con una presión ininterrumpida que no iba a decaer hasta lograr su principal objetivo, no ha durado ni cinco meses.
La Dirección Insular señaló en su día que se iba a hacer todo lo posible para que la llegada del verano, con el inevitable trasiego entre los agentes que se iban a otros destinos, los que cubrían estas vacantes y los que reforzaban la «Operación Verano», no afectara apenas al dispositivo que se había instalado. Los hechos demuestran, a simple vista, que esta premisa no se ha podido cumplir.
La reducción de la participación de la Policía Local en el operativo de Comisaría se dejó ver a las pocas semanas del inicio en febrero de la «Operación Esperanza». Los agentes del Ayuntamiento «obligaban» a los del Cuerpo Nacional de Policía a cubrir el punto que vigilaban al ser los primeros destinados a otros servicios. El dispositivo de vigilancia establecido, a finales de mayo ya se encontraba bajo mínimos. Fuentes policiales, sin embargo, explicaron entonces a este diario que se continuaba trabajando dentro del barrio con agentes de paisano que seguían controlando lo que ocurría en su interior.
Las distintas visitas realizadas por redactores de este periódico a sa Penya en las últimas dos semanas y a diferentes horas se han saldado con la inexistencia de ningún indicio que denotara presencia policial, aunque fuera puntual.
Ultima Hora Ibiza y Formentera ha intentado en repetidas ocasiones contactar durante estos dos últimos días con el director insular, Luis Carlos Fernández Tejerina, para conocer con exactitud en qué estado se encuentra la denominada «Operación Esperanza» y si el anunciado plan corresponde a un cambio radical de estrategia contra la droga de sa Penya o bien si la ausencia de vigilancia estática se debe a una reordenación de efectivos.