La Guardia Civil de Tráfico trabajaba ayer para identificar los cadáveres de dos jóvenes, probablemente de nacionalidad británica, que fueron arrollados de madrugada en la carretera de Sant Antoni en el kilómetro donde se ubican dos conocidas discotecas y donde en los últimos años han perdido la vida varias personas en iguales circunstancias. Otro joven resultó herido muy grave al ser también atropellado a la misma hora en las cercanías de Sant Antoni.
Fuentes de la Guardia Civil señalaron a este periódico que el destacamento de Eivissa ya había realizado este año un nuevo informe en el que recordaba la situación de alto riesgo que se vive en esta carretera, especialmente en los cruces de las discotecas, zonas en donde los turistas se concentraban y cruzaban la calzada en grupos y sin apenas tomar precauciones.
El accidente que costó la vida a los dos turistas, de unos 20 años de edad, ha ocurrido justo dos semanas después de que otros dos ingleses murieran al intentar cruzar la calzada en el mismo kilómetro. Este siniestro también provocó heridas muy graves al conductor del turismo que se vio implicado, un joven ibicenco de 25 años.
Los dos atropellos de la pasada madrugada tuvieron lugar sobre las 4.30 horas y en situaciones parecidas. Las víctimas se vieron arrolladas primero por un turismo y seguidamente por otro que venía detrás y cuyo conductor tampoco pudo evitar la fatal colisión. Todos los usuarios de los coches implicados resultaron ilesos.
Marc M.S., de 30 años, tuvo mejor suerte que sus compatriotas fallecidos en la zona de los cruces de las discotecas cuando dos turismos impactaron contra él en el kilómetro 14'450. El turista, según los últimos informes recogidos al cierre de esta edición, se halla ingresado en la Policlínica de Nuestra Señora del Rosario, aunque sus heridas son muy graves.