El titular del juzgado de Instrucción número 1 de Eivissa ordenó ayer tarde el ingreso en la cárcel, en régimen de preso preventivo, de Freddy M.R., el colombiano de 30 años que fue sorprendido el pasado miércoles en un bar de Sant Antoni con un kilo de cocaína.
El juez, de acuerdo con lo pedido por el ministerio público, dejó a su vez en libertad con cargos a la mujer de nacionalidad dominicana que se hallaba en el bar con el sospechoso y que también fue arrestada cuando agentes de la Policía Local de Sant Antoni llevaban a cabo un control de ticketeros en el citado bar, ubicado en la Avenida Doctor Fleming.
La autoridad judicial, sin embargo, fijó medidas cautelares a la sospechosa para evitar el riesgo de fuga. Carmen M. P. , una mujer que trabajaba en un club de alterne y con varios años de residencia en la isla, no podrá disponer por ahora de su pasaporte y tendrá que comparecer diariamente en el juzgado.
Agentes del Grupo de Investigación Fiscal Antidrogas (Gifa) de
la Guardia Civil pusieron a la pareja a disposición judicial a
mediodía.
Las sospechas que se han recabado hasta la fecha indican que el
colombiano que ha sido detenido había llegado pocas horas antes de
su detención a la isla, lugar donde contactó con la empleada del
club de alterne que también ha sido arrestada. Tras ello intentó
convencerla para que le ayudara a buscar un comprador después de un
viaje en el que él mismo se arriesgó a traer la droga. El mismo fue
sorprendido con la cocaína por los agentes de policía después de
dar muestras de gran nerviosismo y de intentar huir del local
cuando se procedía a su identificación por las sospechas que
levantó su comportamiento. Los agentes, junto a la mesa donde se
sentaba la pareja, hallaron varias bolsas de compra. En una de
ellas, entre una barra de pan y unos panecillos, apareció un bloque
compacto de cocaína que estaba envuelto por un plástico
transparente.