El fiscal solicitó ayer 15 años de prisión para el empresario argentino R.B.B., a quien acusa de incendio, simulación de delito y tentativa de estafa, ya que, al parecer, prendió fuego a su lujoso apartamento del Paseo Marítimo de Palma para cobrar una indemnización de la compañía de seguros.
El incendio, que destruyó por completo la vivienda, se produjo en mayo de 1996, y el dueño del mismo alegó que dos individuos habían asaltado su domicilio, le habían robado las joyas y habían quemado el inmueble. Sin embargo, la Policía descubrió numerosas contradicciones en su declaración, por lo que empezó a investigar hasta descubrir que, seis meses antes, el empresario había suscrito una póliza, asegurando en 55 millones el continente y en 25 millones el contenido.
Además, días antes del incendio, el acusado había cambiado las alfombras y los muebles de su despacho y había retirado numerosos cuadros de valor. Todas estas sospechas, unido al hecho de que R.B.B. atravesaba un difícil momento económico, motivó que la Policía concluyera que el incendio lo había provocado él. Ante el tribunal de la Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Palma, el procesado insistió en la versión de que la casa fue asaltada.