Madrugada movida en la urbanización Siesta de Santa Eulària. Tres vehículos, todos ellos descapotables de matrícula española estacionados en calles distintas pero muy cercanas, fueron incendiados y sin testigos en el plazo inferior a las dos horas en lo que parece la acción intencionada de un desaprensivo. Se da la circunstancia de que uno de los coches afectados pertenece a una residente alemana de la isla que hace algo menos de un año perdió su vehículo en un hecho idéntico al sucedido durante la madrugada de ayer.
El primer incendio se produjo sobre las cuatro en la calle Lirios. En pocos minutos un BMW resultó calcinado sin que se pudiera hacer nada pese a la intervención de agentes de la Policía Local, Guardia Civil y la movilización de los bomberos. Aún nos e había dado por concluido este servicio cuando pasadas las cinco de la mañana se oyó una explosión, provocando la alarma en el vecindario. Esta vez la «víctima» fue un Suzuki Santana estacionado en la calle Margaritas. La historia volvió a repetirse momentos después cuando aún no eran las seis de la madrugada. Todo el mundo actuaba en este incendio cuando el fuego apareció en un todoterreno Wrangler que había aparcado en la calle Las Dalias.