La responsable del juzgado de lo Penal número 1 de Eivissa, Clara Ramírez de Arellano, ha decidido absolver a la doctora de Es Viver que el pasado día 17 de febrero fue juzgada después de que la familia de una paciente que murió por un cáncer de mama decidiera emprender acciones legales al entender que se pudo incurrir en una negligencia que pudo evitar el fallecimiento de la mujer, madre de cinco hijos y de 50 años de edad. Todo ello, después de que no se le detectara a tiempo un cáncer de mama tras varias pruebas (a excepción de una biopsia) que llevaron a cabo facultativos del IB-Salut.La sentencia, desarrollada extensamente, deja claro que la facultativa no cometió en ningún caso dejación alguna de sus funciones y que por tanto no se le puede achacar ninguna imprudencia en el desempeño de su labor que pudiera ser motivo de una condena penal.
Dicha persona se enfrentó finalmente a una acusación de imprudencia leve con resultado de muerte después de que la abogada de la familia que presentó la denuncia modificara los cargos, rebajando a falta lo que en principio era una petición por delito sustentada en la supuesta comisión de una negligencia grave. La acusación particular reclamó una multa para la doctora y el pago de una indemnización de 75 millones, cantidad de la que también se hacía responsable al Ibsalut.
Se da la circunstancia de que otra juez, en este caso del juzgado de lo Penal número 2, también absolvió días atrás a otro médico, un ginecólogo, y a una comadrona a los que se les sentó en el banquillo tras responsabilizárseles de la muerte de un recién nacido.