El servicio Marítimo de la Guardia Civil incrementará en un 60% su dotación de patrulleras después de que el ministerio de Interior prevea invertir 37 millones de euros para reforzar la flotilla actual del instituto armado con 20 nuevas embarcaciones. Todos estos barcos serán operativos en el plazo de dos años.
La anterior delegada del Gobierno, Catalina Cirer, mostró en su día su especial interés porque Eivissa pudiera servir como base fija a una embarcación de este tipo. Balears cuenta en la actualidad con dos patrulleras, una de mayor tamaño que otra, y ambas tienen su base en Mallorca. Sólo se desplazan en ocasiones al resto de las islas. En todo el territorio nacional, el instituto armado posee 33 patrulleras.
La intención de Interior al respecto es hoy en día una incógnita. Un portavoz de este ministerio remitió a este periódico directamente a la Dirección General de la Guardia Civil, lugar donde se señaló escuetamente que no se iba a informar del despliegue de las patrulleras. Hasta ahora, las patrulleras de la Guardia Civil visitan Eivissa, especialmente los meses de verano, dentro de servicios rutinarios de control, aunque desde el instituto armado siempre se recalca que sus tripulaciones están siempre preparadas para poner rumbo a las Pitiüses en caso de necesidad. Estos barcos están dotados de sistemas GPS, radar y de otros modernos adelantos que facilitan la navegación y que los hacen ideales en misiones en que se precisan altas velocidades.
La 8º Compañía de la Guardia Civil de Eivissa, sin embargo, sí cuenta con embarcaciones semirrígidas y neumáticas con las que se equipa a las unidades actividades subacuáticas. El Geas de Eivissa cuenta con lagunas de las 81 embarcaciones de estas características que hay distribuidas entre el resto de destacamentos costeros donde hay destinados estos grupos.