El inicio del verano está siendo malo hasta para la delincuencia de temporada. Menos robos y más detenidos que otros años en este mismo periodo, según confirman todas las fuentes policiales consultadas por este periódico.
Una de las principales razones de este fenómeno se atribuye a que las fuerzas de seguridad están pudiendo repartir mejor sus medios al no haberse registrado aún grandes aglomeraciones que sirvan a los grupos especializados en hurtos y 'tirones' para camuflarse después de cometer varios delitos. La dificultad que están teniendo los ladrones para encontrar lugares favorables está permitiendo también a la Guardia Civil, a las policías locales y a los agentes de Comisaría poner enseguida medios para cortar de raíz los focos de delincuencia. Así, fuentes pertenecientes a distintos cuerpos policiales confirman que en sus respectivas zonas que los grupos que se han detectado han sido desmantelados a los pocos días. En Sant Antoni y la bahía, la Guardia Civil y la Policía Local han resuelto los robos habidos con el arresto de media docena de personas, número igual al que se ha registrado en Santa Eulària. Ello significan la desmantelación de unos cuatro grupos, además de otras detenciones individuales que se relacionan con delitos esporádicos ocasionados por delincuentes habituales de la isla. Estos últimos generalmente también suelen ser los responsables de hechos más violentos que los hurtos como los tirones de bolso o robos con intimidación.