EFE/R.S.
Treinta y dos personas han muerto en las carreteras de Balears este
año en accidentes de circulación, casi la mitad de las 61 víctimas
registradas el año pasado en las mismas fechas, informó ayer la
Dirección Provincial de Tráfico. Un tercio de los fallecidos, sin
embargo, corresponden a siniestros de circulación ocurridos en las
Pitiüses, lugar donde, por contra de lo que ha sucedido en las
otras dos islas, la mortandad se ha disparado si se tiene en cuenta
que en todo 2004 se recogieron 17 casos.
Hasta ayer, 23 personas han perdido la vida en Mallorca en percances automovilísticos y nueve en las Pitiüses, mientras que en Menorca no se ha registrado ningún accidente mortal. Tráfico, sin embargo, no ha contabilizado la muerte de una persona implicada en un accidente ocurrida el mes pasado en Ca na Negreta al haberse producido en el hospital 24 horas después del siniestro. Este hecho, pese a todo, eleva a diez el número de personas que han perdido la vida en las Pitiüses. Tráfico achaca la velocidad inadecuada como causa principal de al menos un tercio los accidentes fatales contabilizados este año en todo el archipiélago.
Del total de víctimas, el 28,12 por ciento (nueve) eran menores de 30 años, cuando el año pasado este porcentaje superaba el 36 por ciento.
Los meses de febrero y abril fueron los de mayor accidentalidad, con ocho muertos en cada caso, seguidos de enero y marzo, con seis cada uno, en tanto que en estos nueve primeros días de mayo la cifra de fallecidos se eleva a cuatro. Según la misma fuente, 21 de los fallecidos eran conductores de los vehículos implicados, 4 eran viajeros, 6 eran peatones y 1 era ciclista. Además, el 78 por ciento de las víctimas mortales eran hombres; el 21,87 por ciento tenía más de 65 años, y el 21,9 por ciento eran extranjeros.