R.S.
Jornada negra en las carreteras de Eivissa. El día concluyó con múltiples accidentes, entre ellos uno mortal ocurrido a última hora de la tarde en el cruce del hipódromo de Sant Rafel. Una mujer pereció en este siniestro después de que colisionaran un Jeep Cherokee y un Mercedes, choque que se saldó con varios heridos leves, entre ellos un niño de corta edad. La víctima, que viajaba con su familia, quedó atrapada entre los hierros del Mercedes en el que iba, obligando a intervenir a los bomberos para poder rescatar su cadáver. El Jeep, por su parte, quedó volcado en la carretera. El accidente eleva a 14 el número de persona fallecidas en este año en las Pitiüses. El 112 movilizó tanto al 061 como a los bomberos. Otro espectacular choque entre una furgoneta y un camión se saldó con tan sólo un herido de carácter grave. Fue trasladado por una ambulancia ordinaria del servicio del 061 a la Policlínica Nuestra Señora del Rosario, donde fue intervenido quirúrgicamente de urgencia. El herido es la persona que viajaba en el asiento del copiloto de la furgoneta.
Se trata del español J.J.P.P., de 19 años, que sufrió un fuerte traumatismo en el antebrazo derecho cuya cura resultó muy complicada a los cirujanos de la Policlínica, que informaron de que tras la intervención se recupera favorablemente, aunque tendrá que permanecer ingresado aún varios días.
El accidente se produjo a unos dos kilómetros de Sant Rafel, en dirección a Sant Antoni, por causas que se desconocen. Al parecer, el conductor de la furgoneta y el del camión resultaron completamente ilesos. Ayer por la tarde se produjo otro accidente en la Avenida de Santa Eulària de Eivissa entre un ciclomotor y un turismo. El conductor de la moto resultó herido leve.
Mejor suerte tuvieron los tres ocupantes de un coche que se despeñó entre Cala Vedella y Cala'Hort. Todos salieron airosos tras el siniestro, ocurrido cerca de Cala Vedella después de que el coche en el que iban se precipitar por un terraplén desde unos quince metros.