Dos turistas resultaron heridas de diversa consideración ayer sobre la una y media de la tarde por un desprendimiento de rocas y arena que se produjo en la playa de Aigües Blanques, en el municipio de Santa Eulària, informaron el servicio del 112 y la Policía Local de Santa Eulària.
Las españolas N.G.L. y E.G.M., de edades comprendidas entre los 29 y los 30 años, estaban tomando el sol en la zona de Aigües Blanques que se encuentra a la izquierda de las escaleras de acceso a la playa cuando el desprendimiento se les vino encima. Según la Policía Local de Santa Eulària, las víctimas se encontraban muy cerca del agua, por lo que el desprendimiento no les alcanzó de lleno.
Pese a ello, una de ellas sufrió un golpe en la cabeza y fue dada de alta pocas horas después, y la segunda sufrió una fractura en un brazo por la que fue sometida a una intervención quirúrgica y quedó ingresada en Can Misses.
Dos ambulancias del servicio del 061 acudieron a la playa, cuyo personal se encargó primeramente de atender in situ a las dos bañistas, que después fueron trasladadas al hospital público.
Según fuentes municipales, se calcula que unas dos toneladas de tierra y roca cayeron sobre la playa. En cuanto a las causas del desprendimiento, las mismas fuentes señalaron que las intensas lluvias caídas en mayo han ablandado el terreno y lo ha podido propiciar, unido a la falta de un mantenimiento adecuado.
A unos cien metros de este área, un lugar de difícil acceso por la parte superior, hay varias casas, cuya construcción, según las fuentes municipales, se piensa que no hay influido en el desprendimiento.