Vecinos de Platja d'en Bossa de la zona comprendida dentro del municipio de Sant Josep han mostrado durante los últimos días, a través de distintos canales y denuncias, su malestar por la presencia de mujeres de origen africano a las que se vincula directamente con actividades de prostitución calle. Los vecinos afirman que se han dado casos de personas, sobre todo turistas, que han sido robadas bien después de concertar una cita con estas mujeres o bien después de ser directamente abordadas por éstas aprovechando el estado de ebriedad de las víctimas.
Los afectados también se han quejado de un aumento de suciedad y basura en las calles en las que éstas intentan reclamar la atención de potenciales «clientes» y de molestar a turistas que no quieren saber nada más de ellas.
La mayor parte de las prostitutas, algunas de ellas se cree procedentes de la zona de ses Figueretes, se están «instalando» en la avenida Pedro Matutes Noguera, en el tramó más próximo a los apartamentos Jet. No sólo hacen la calle en horario nocturno sino que, según distintas fuentes, también aprovechan las primeras luces del día para reclamar la atención de los turistas que bien vuelven a sus hoteles tras pasar la noche en vela o bien aquéllos, que tras numerosas horas sin dormir, transitan la zona buscando nuevos bares que estén abiertos.
Presión policial
Las mismas fuentes mostraron sus sospechas a que la «presión» policial contra la prostitución callejera en Vila, formalizada tras la modificación de las ordenanzas municipales, haya llevado a estas mujeres a desplazarse a Platja d'en Bossa buscando más libertad para sus movimientos.