Un joven formenterés de 26 años, A.V.M., sufrió en la madrugada de ayer un grave accidente en la denominada curva de la Casilla, del que salvó la vida casi de milagro a tenor del estado en el que quedó el vehículo. Según fuentes de la Guardia Civil, el parte médico mencionaba que estaba herido leve a consecuencia de la salida de carretera y posteriores choques y vuelcos.
Los hechos ocurrieron alrededor de las cinco de la mañana en el hito kilométrico 4,3 de la PM-820, la carretera que va de la Savina a la Mola, cuando A.V.M. se salió de la calzada y el vehículo, un Alfa Romeo 147 Cup, tomó el inicio del guardarrail como 'pista de despegue' y tras tronchar un par de sabinas, partir por la mitad un algarrobo y arrancar matas de romero, quedó en posición 'normal', sobre las cuatro ruedas en un muro de piedra seca.
La pared sufrió algunos desperfectos como ya ocurrió unas decenas de metros antes con otro muro de características similares contra el que también impactó el vehículo. El accidente del que no se conocen las causas aunque se apunta a velocidad incorrecta o a una distracción del conductor cuando no a la suma de ambos factores. En el hospital se practicaron pruebas para aclarar si el conductor iba bebido, tal y como barajaba la investigación.