La temporada turística se cierra con nuevas agresiones en las que se han visto personas implicadas con los servicios de seguridad de discotecas o centros de ocio de la Isla. Dos porteros, uno español y un rumano, y otra persona también relacionada con hechos con daños, han sido detenidos en los últimos días por la Guardia Civil acusados de delitos de lesiones. Todos los incidentes ocurrieron en Platja d'en Bossa. El último de los sospechosos, un joven rumano de 25 años nacido en Timisoara, se entregó ayer después de presuntamente ocasionaran lesiones graves a un argentino en las proximidades de la puerta del Ushuaïa tras propinarle un puñetazo que le dejó inconsciente.
Adrián G., luchador de boxeo tailandés (Muay Thai), acompañado de su abogado, se entregó ayer por la mañana en el puesto de la Guardia Civil de Sant Antoni después de que supiera buscado por las lesiones que en la tarde del sábado motivaron el ingreso hospitalario en Can Misses de un argentino de 43 años que, con entradas, intentaba entrar con su novia al Ushuaïa. La víctima estaba ayer pendiente de ser intervenida quirúrgicamente de las fracturas en la mandíbula nariz y paladar. El paciente, sin daños neurológicos, estaba consciente pero sus lesiones se consideran graves. Adrián G,. tras llegar al puesto de Sant Antoni, negó su actual relación con este establecimiento, lugar de un suceso similar que este verano le costó la vida a un camarero, y dijo que se había limitado a «dar un toque». El afectado, que orinaba a 20 metros del Ushuaïa, recibió un puñetazo en la cara.
Fuentes del hotel aseguraron que esta persona dejó de trabajar en agosto para este sitio precisamente por su «carácter conflictivo en las formas». La Guardia Civil, sin embargo, investigaba qué hacía Adrián G. en la puerta del local junto con otras personas. En su perfil de una red social, Adrián G. mantiene pertenecer al servicio de seguridad del Ushuaïa.
Asimismo se apresó a los españoles Joan B.R. y Félix M.G., de 21 años y 29 años, el primero, portero del Bora-Bora, por supuestamente propinar puñetazos y patadas a un marroquí de 24 años que tuvo que ser atendido de un traumatismo craneoencefálico durante la tarde del viernes. Joan B. R. fue puesto en libertad sin cargos tras el juicio rápido celebrado por el juzgado de lo Penal.
Por último, en otra discoteca de Sant Antoni se arrestó al suizo Murat E. por una pelea con un español.