Prevención y disuasión en toda regla. Guardia Civil y Policía Local de Santa Eulària está aunando esfuerzos para aumentar la vigilancia en las zonas rurales de este municipio y no únicamente con simples patrullas. Los acuerdos entre los responsables de este ayuntamiento y los mandos del Instituto Armado han permitido que desde hace más de un mes se hayan intensificado los controles en los núcleos poblaciones más diseminados y que tradicionalmente se han encontrado más desprotegidos.
Los últimos robos de los que se han tenido conocimiento han impulsado una mayor presión en estas zonas, según confirmaron fuentes policiales. A ello se suma un especial interés por impedir que puedan producirse hechos violentos, como ha ocurrido otros años.
Un portavoz del Ayuntamiento de Santa Eulària, por su parte, señaló que estos dispositivos se montan de acuerdo con las posibilidades organizativas y de servicio de las plantillas. Al respecto, los agentes locales han colaborado esta semana con este programa desarrollando operativos de control específicos en áreas del camí de Musson y Sant Carles.
Caminos
Los controles se están llevando a cabo de forma exhaustiva y con atención especial a caminos rurales y carreteras vecinales que llevan a entornos poblaciones sensibles de ser susceptibles del interés de grupos de ladrones.
Tanto los agentes locales como los guardias civiles no se están limitado a verificar matrículas y realizar meras comprobaciones en las personas que ocupan los vehículos que son parados. Los operativos también están valiendo para chequear la identidad de los residentes de estas zonas y conocer de primera mano sus problemas e inquietudes en materia de seguridad. El alcalde Vicent Marí, en este sentido, comunicó recientemente al director insular, Rafael García Vila, su interés porque se tomaran todas las medidas posibles para contar con presencia y vigilancias de unidades de Guardia Civil en las carreteras del municipio sino también para lograr una mayor estabilidad de la plantilla del puesto de Santa Eulària.