Uno de los dos radares instalados para controlar la velocidad de los vehículos que circulan por la carretera de Santa Eulària, a la altura del cruce de Can Clavos, ha sufrido fuertes desperfectos.
Concretamente se trata del que fotografía a los conductores que marchan en dirección a Vila, enfrente del letrero que indica que desde ese punto hay 10 kilómetros de distancia a Santa Eulària y 23 a Portinatx. En él se puede apreciar cómo alguien ha golpeado con algún objeto contundente y de forma intencionada a las dos lentes de la caja metálica vertical más alta y más estrecha del radar, rompiendo sus cristales y dejándolo, aparentemente, inutilizado.
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