Un hombre de mediana edad ha fallecido este miércoles tras ser reducido y detenido por siete agentes de los Mossos d'Esquadra en la plaza Molina de Barcelona, según ha informado la policía catalana.
Los hechos han ocurrido cuando una panadería de la zona ha llamado a los Mossos porque unos de sus clientes estaba muy exaltado y molestaba al resto de clientes de la terraza del local.
Cuando los dos agentes de la patrulla han pedido que se identificara, esta persona se ha mostrado hostil y muy exaltada, por lo que los agentes han pedido refuerzos, según el relato de los Mossos.
Finalmente, los siete agentes han conseguido reducir a esta persona y lo han esposado sin tener que utilizar sus defensas. Una vez esposado, el detenido se ha encontrado mal y se ha desvanecido, por lo que los agentes han llamado rápidamente a los servicios médicos de urgencia, que ha llegado al lugar de los hechos sobre las 18:45 horas.
El detenido ha sido trasladado en ambulancia al hospital Clínic de Barcelona, en donde ha fallecido, según ha informado los Mossos, unos datos que por el momento son provisionales.
En un momento en el que se discuten algunas de sus actuaciones por sucesos como el del Raval, donde murió el empresario Juan Andrés Benítez tras ser duramente reducido, los Mossos han informado de que desde el primer momento se ha abierto una «información reservada» por parte de asuntos internos y una investigación para analizar la actuación de los siete agentes.