Al menos trece personas han sido detenidas o quedaron imputadas por conducir bajo los efectos del alcochol como resultado de los controles de alcoholemia realizados a lo largo del fin de semana por los agentes de la Guardia Civil de Tráfico y las diferentes policías locales de la Isla. Se trata de conductores que arrojaron tasas superiores a 0,60 miligramos de alcohol por litro de aire espirado. Curiosamente, al menos otras tres personas fueron denunciadas por los agentes de la Policía Local de Sant Josep por dar positivo en los controles de alcoholemia que se realizaron en la zona de Platja d'en Bossa en las noches del sábado al domingo y del domingo al lunes. También fue denunciado otra persona por conducir bajo el efecto de drogas.
De esta forma, en la primera de estas dos noches la Policía Local de Sant Josep ordenó a la grúa la retirada de 22 vehículos, también denunciaron a dos personas por realizar venta ambulante y formularon, en tan solo esa noche, 59 infracciones del reglamento general de circulación. Al día siguiente, los agentes retiraron con la grúa otros tres vehículos.
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Que se pongan las pilas los controladores, que está muriendo demasiada gente inocente por culpa de esa gentuza desaprensiva. Ya han atropellado a varios en lo que llevamos de año, en cambio ellos (los borrachos) quedan ilesos.