La segunda caja negra del avión de Air Argelia operado por la compañía española SwiftAir, pilotado por dos mallorquines, que se estrelló el pasado día 24 de julio en el norte de Mali, no funcionó y no pudo grabar las conversaciones de la tripulación en la cabina, según informó hoy la emisora francesa «Europe 1».
«La grabadora, un modelo antiguo con banda magnética, estaba fuera de servicio durante el vuelo del avión de Air Argelia por una razón desconocida», avanzó esa emisora antes de que los expertos franceses de la Oficina de Investigación y Análisis (BEA) ofrezcan hoy una primera rueda de prensa sobre el accidente a las 13.00 horas GMT.
La ausencia de esos datos complicará la investigación sobre el accidente, pues los expertos franceses solo podrán contar con la primera de las cajas negras, que registra los datos del avión en vuelo, con parámetros como la velocidad, la altitud o la trayectoria.
El avión, un MD-83 que tenía como destino Argelia, llevaba 110 pasajeros a bordo, la mayoría de ellos de nacionalidad francesa, y seis miembros de la tripulación, todos españoles.
Ayer, el jefe de los investigadores judiciales franceses, el coronel de la gendarmería Patrick Touron, aseguró que las víctimas no sufrieron en el accidente pues el avión cayó de forma vertical a gran velocidad, «porque estaba literalmente pulverizado».
«Uno se da cuenta de la naturaleza de los daños porque el avión está totalmente fragmentado y que los pasajeros debieron sufrir la misma suerte», indicó Touron, que señaló que no se ha encontrado ningún asiento y ningún equipaje entre los escombros.