Al menos 17 montañeros han muerto y 51 han resultado heridos como consecuencia de avalanchas producidas en el Everest tras el terremoto de 7,8 grados que este sábado sacudió Nepal, dejando centenares de muertos.
Una fuente del Ministerio de Turismo que prefirió guardar el anonimato indicó a Efe que de acuerdo con información que tienen por personal y sherpas que se encontraban en la montaña en el momento del movimiento telúrico en el Everest se produjeron 17 muertos y al menos 51 heridos.
«De ellos 41 están en estado crítico», indicó la fuente, que no pudo precisar nacionalidades ni el número de personas desaparecidas.
Ayer el propio Ministerio de Turismo informó de que al menos 10 montañeros extranjeros murieron en las avalanchas.
Desde primera hora de la mañana de este domingo las autoridades acceden al campo base del Everest con helicópteros enviados desde la India para ayudar en las tareas de rescate.
Según indicó ayer el montañero y fotógrafo español Javier Camacho a Efe que el sismo provocó una avalancha desde el pico Pumori que sepultó algunos campamentos, especialmente los que integraban montañeros chinos y japoneses.
De acuerdo con diversas fuentes, en el momento del terremoto, al mediodía del sábado, hora local de Nepal (6.11 GMT) cientos de personas se encontraban en el campo base, que estos días tiene una gran afluencia de alpinistas debido a que la temporada de escalada se encuentra en pleno auge.
Con las muertes de este año, el montañismo nepalí vuelve a ponerse de luto un año después de que una avalancha acabara con la vida de 16 sherpas y con la temporada de escalada en la montaña más alta de la tierra.
El terremoto del sábado, de 7,8 grados en el escala Richter, deja hasta el momento alrededor de 2.000 muertos y casi 5.000 heridos, lo que lo convierte en la peor tragedia en décadas en el país y la catástrofe natural más grave en la región desde el terremoto de Cachemira de 2005, cuando fallecieron 84.000 personas.