Ayer al mediodía los vecinos del barrio de Can Burgus, en los alrededores del Mercadona del barrio de sa Carroca, se llevaron un buen susto cuando ardieron unos 3.000 metros cuadrados de palmeral y se quemó un coche aparcado en los aledaños del terreno quemado.
El Cuerpo de Bomberos de Eivissa fue avisado sobre las 14.00 horas, momento en que nueve bomberos, un vehículo con una bomba rural pesada y una nodriza se desplazaron al lugar del incendio. Tal fue el susto que incluso los propios vecinos salieron con mangueras provenientes de sus viviendas para apagar el fuego que se propagó rápidamente a causa del viento. De hecho, los vecinos de la zona aseguraron que pasaron mucho miedo, y fueron ellos mismos quienes llamaron a los servicios de emergencias.
El incendio se inició en el palmeral por causas que, al cierre de esta edición se desconocían, aunque se baraja la posibilidad de que haya empezado junto a las obras de una vivienda situada junto al palmeral. Las llamas quemaron 3.000 metros cuadrados de terreno rural y un coche que quedó totalmente calcinado por las llamas en la calle Can Burgus. Al incendio se desplazaron también un vehículo de extinción de incendios del Ibanat, la Policía Local de Sant Josep, Protección Civil y la Guardia Civil.