La dueña de un perro de presa canario que el pasado 17 de marzo mató a otro can e hirió a una niña de cuatro años en Colmenarejo (Madrid) puede enfrentarse a una multa de entre 4.000 y 15.000 euros e incluso ser condenado prisión, mientras que el perro deberá realizar un curso de adiestramiento.
Así lo ha explicado el concejal de Seguridad del Ayuntamiento de Colmenarejo y jefe de Protección Civil, Fernando López Sevillano, quien ha confirmado que el suceso ocurrió ese día cuando una mujer que se había quedado a cargo de un perro bichón maltés ese fin de semana y se dirigía con éste y con su hija a la casa de su hermano.
La agresión se produjo en el patio común de dos parcelas de la carretera de Galapagar de la localidad, donde el perro de presa canario, de unos 70 kilos, atacó al pequeño bichón maltés, matándolo casi en el acto.
A continuación se dirigió a la niña, de cuatro años, y le mordió en el abdomen y en la cabeza, y también hirió a la madre de la pequeña y al tío de esta, que forcejearon con el animal, ha relatado el edil.
López ha precisado que a nivel administrativo el dueño puede ser multado con entre 4.000 y 15.000 euros, dependiendo de si la calificación es grave o muy grave, y que incluso puede ser condenado a cárcel.
El perro agresor no será sacrificado en virtud de la nueva ley de protección de animales de compañía, que prevé «sacrificio cero» de mascotas, pero sí deberá realizar un curso de adiestramiento para valorar sus capacidades.
El can no tenía antecedentes formales de agresión pero tuvo un suceso anterior de mordedura con otros amigos de los dueños que no tuvo «constancia legal», según el concejal, que ha explicado que el juzgado de San Lorenzo de El Escorial que lleva el asunto ha ordenador enjaular al perro y ponerlo en cuarentena en Guadarrama hasta que se analicen las pesquisas de la Guardia Civil.
Al dueño del perro le falta tramitar la licencia de raza peligrosa según la nueva ordenanza de Colmenarejo, que es una solicitud especial para los que poseen este tipo de ejemplares, ha matizado.
La Guardia Civil ha explicado que continúa investigando los hechos y por el momento no ha imputado al dueño del animal, aunque podría serlo por un delito de lesiones.