Los jóvenes de Sant Antoni pudieron despedir el año ayer en la peculiar fiesta de noche vieja celebrada anticipadamente en el Espai Jove de esta localidad.
Chicos y chicas de entre doce y veintiún años pudieron bailar al son de la música que ellos mismos pincharon en una fiesta que lleva ya varios años celebrándose y que tiene como fin reunir a los usuarios del centro por última vez antes de que finalice el año y celebrarlo, pues hoy el espacio está cerrado.
Una de las monitoras del Espai Jove aseguró que cada día pasan por el local entre treinta y cuarenta jóvenes, un número considerable si se piensa en el tamaño de las instalaciones. Chicos y chicas que o bien participan en las actividades organizadas o simplemente quedan allí mediante el boca a boca con el fin de jugar y divertirse.
La fiesta pre-uvas, como ha sido bautizada esta celebración la cual tiene gran acogida entre los jóvenes usuarios del centro, estaba incluida en el programa de fiestas de Navidad de Sant Antoni y en ella los jóvenes pudieron disfrutar del cotillón y además comieron las típicas uvas de noche vieja.
El Espai Jove Sant Antoni está abierto al público por las tardes, pero últimamente se están llevando a cabo actuaciones para realizar actividades por las mañanas y para los adultos.