Las instalaciones del pequeño y coqueto centro social de Forada, en Buscastell, acogieron ayer por la mañana una gran jornada de hermandad en la que participaron los alumnos de los colegios de Educación Primaria de Sant Mateu, Santa Agnès y Buscastell.
La fiesta tuvo de todo en vísperas de Sant Jordi. Por un lado hubo cuentacuentos y juegos, donde los más pequeños pudieron bailar y reír en el interior del centro bajo las indicaciones de un divertido maestro de ceremonias. Y por otro lado, en el exterior, junto al aparcamiento y las pistas deportivas, se celebraron distintos talleres destinados para los más mayores. En ellos, todos los niños participantes, con sus respectivos nombres pegados en una pegatina que colgaba de su pecho, pintaron cuadros, construyeron grandes escudos de cartón para ser los mejores caballeros del reino e, incluso participaron en algún taller de elaboración de cuentos.
Sin embargo, lo más importante de todo fue la jornada de convivencia entre los tres colegios de estas pequeñas localidades del interior de Eivissa y que permitió que Isabella, Julen, Leo, Eire, Alba, Aleix, Elisa, María, Uma, Ian, Manu, Candela, Josep, Caterina, Ignacio, Kali o Ariel, pasaran unas horas maravillosas conociendo nuevos compañeros de juegos.